Juan Carlos Carcedo muestra un talante inquebrantable en las vísperas de la jornada 9 y la visita del Real Oviedo a La Romareda. El entrenador del Real Zaragoza pasó, con su habitual discurso, tangencialmente por el escenario de presión y exigencia que tienen ya él y su equipo en este duelo entre iguales, dos equipos ubicados en los puestos 15º y 16º de la clasificación, igualados a todo, alejados de sus aspiraciones de vivir el torneo en la zona noble todo el año.

"Hemos estado trabajando esta semana, viendo nuevamente el partido ante el Eibar, en el que creo que hicimos muchas cosas buenas, positivas, sobre todo un primer tiempo en el que creo que dominamos el juego y se llevó hacia donde nosotros queríamos", comenzó contando el riojano sobre la situación del presente más concreto del vestuario.

Se le preguntó abiertamente a Carcedo a qué quiere jugar el Real Zaragoza, pues lo visto en estos dos primeros meses de liga no lo dejan claro a ojos de muchos observadores. "Intentamos tener la posesión, ser dominadores, aunque no siempre se puede. Somos de los equipos con más posesión de la liga respecto del rival. Y también queremos atacar los espacios. Y si nos presionan arriba, tener la opción de jugar más largo en busca de ese rechace, esa segunda jugada, ese rechace...", respondió impertérrito.

Y añadió, en su permanente intención de remarcar lo que considera que es principal virtud de su bloque: "Y en el plano defensivo, creo que estamos trabajando bien. Somos de los equipos menos goleados (6 tantos encajados), con 4 puertas a cero... El equipo creo que también hace cosas buenas", indicó antes de admitir lo obvio, que "es cierto que en el aspecto ofensivo tenemos que mejorar para ganar partidos, eso está claro".

La presión, las dudas, su figura ya en el foco

Enseguida se le preguntó cómo está él de ánimos y si ya empieza a sentir la presión que genera siempre el Real Zaragoza cuando no hay victorias y las clasificaciones se tuercen. "Un profesional, lo que tiene que hacer es trabajar en el día a día, ver cómo están los jugadores, analizar lo que te transmiten... Y en eso, puedo decir que somos unos privilegiados. Tenemos una plantilla que trabaja maravillosamente, que nos transmite que este es el camino en el que tenemos que seguir insistiendo, así que el convencimiento de los futbolistas está ahí", fue su primera respuesta, subrayando el matiz de que cuenta con el apoyo del vestuario en estos tiempos de dudas. 

Se le insistió a Juan Carlos sobre la posibilidad de que, si los malos resultados continuasen, su posición como entrenador quedaría notablemente debilitada. "Los profesionales vivimos estas situaciones siempre. Esto es como un estudiante que estudia bien y luego tiene el examen, que es donde tiene que demostrarlo. Nuestro trabajo se basa en el día a día y ese dice que estamos en una buena dinámica. Ver a los jugadores cada día, su intensidad, lo que nos trasladan en muchas conversaciones con ellos... me hace pensar que vamos a hacer un buen partido contra el Oviedo", argumentó desde su subjetivo punto de vista.

¿Está pensando Carcedo en cambiar de sistema, ese voluble 4-2-3-1, convertido en algunos momentos en 4-1-4-1 o 4-3-3 según discurren los partidos? Fue otra cuestión directa que se le demandó al logroñés. "Lo importante es que ya tenemos la posibilidad de contar con tres delanteros y, por eso, podemos jugar ya con dos en el campo. Digo muchas veces que, lo importante, no son los sistemas sino la intención que tú tengas. Le estamos dando vueltas a todo ello. Estoy tratando de ver alternativas y posibilidades (nuevas) para intentar tener más ocasiones de gol", dijo en su particular estilo dialéctico de profundizar lo mínimo, aunque las preguntas sean tan contundentes.

Otra pregunta concreta le llegó desde la bancada de los periodistas. ¿Cuántos cambios piensa hacer en el once inicial? "Puede haber algún cambio, aunque creo que un equipo se tiene que sostener en una base. Sí que puede haber alguna modificación que nos ayude a crear más ocasiones, a ser algo más dinámicos en el juego. Seguimos reforzando el aspecto defensivo, pero tenemos que tener más eficacia ofensiva porque el equipo lleva todavía pocos goles. Tenemos que probar a chutar más, contar con más gente que pueda romper a la espalda de los rivales, que se atreva más a hacer el uno contra uno, mejorar en la estrategia atacante... En todo esto he vuelto a insistir esta semana", apostilló Carcedo.