Valladolid, viaje de alta dificultad para el Real Zaragoza

La segunda estación de la liga 21-22 lleva este viernes al Real Zaragoza hasta Valladolid, en lo que es su primer desplazamiento del curso recién empezado. Se estrenarán así los de Juan Ignacio Martínez ‘Jim’ en ese rol tan importante en un torneo largo como es el de visitantes. El calendario ha querido que sea en una cita de alta dificultad, palabras mayores este viaje al José Zorrilla. Un estadio que no se pisa desde diciembre de 2017 porque los vallisoletanos ascendieron a Primera División poco después y han vivido en la élite los últimos tres cursos.

Jim, antes de partir en autocar rumbo a la entrañable Pucela en la tarde de este jueves, describió en tres pinceladas la encomienda a la que se enfrenta hoy el equipo blanquillo en el llamado ‘estadio de la pulmonía’ desde hace ya 40 años. «El Valladolid juega con el 99 por ciento del equipo que lo hizo en Primera. Tienen jugadores diferenciales en Segunda División, en especial en la parte ofensiva», remarcó el técnico alicantino.

En efecto, el brasileño Marcos André (goleador en Las Palmas en la jornada inaugural y con novias en la máxima categoría para poder marcharse en cualquier momento), el israelí Weissman, el veterano Óscar Plano, el canario Roque Mesa (autor del primer gol de la final de la promoción perdida por los zaragocistas en Las Palmas, aunque todo el mundo recuerde el crucial de Araujo), el africano Sekou Gassama... son piezas atacantes con prestaciones superiores a la media de la división de plata, al menos a priori. «Poseen mucha pólvora y ahí tendremos que estar muy atentos y actuar con muchas precauciones», añadió Jim al respecto, marcando de alguna manera tendencia respecto de lo que aguarda esta noche a orillas del Pisuerga. El entrenador del Zaragoza también puso el foco en su colega de enfrente, uno de los técnicos de moda en el último año y medio, Pacheta. «Saca el máximo rendimiento a sus equipos y es otro elemento a tener en cuenta», apuntó Jim.

El cuadro zaragocista acude a Zorrilla en fase de construcción, con cinco fichajes nuevos y a falta, por lo menos, de dos más en el sector atacante. Y le sobran dos piezas de las actuales (no han sido citados ni Larrazabal ni Ros), a expensas de que alguno de los que andan expuestos en el escaparate pueda irse de aquí al día 31. De los cinco refuerzos, Gámez será titular fijo. Y Sainz y Álvaro Giménez ganan enteros para estrenarse de inicio. Por su parte, tanto Petrovic como Lluís López, lo lógico es que empiecen la tarde en el banquillo.

Jim no tuvo problemas en admitir que el debut ante el Ibiza el pasado viernes fue un fiasco serio. «Hicimos un sobreesfuerzo y, ni aun así, nos dio para ganar. Incluso corrimos mal. Y los jugadores lo notaron al final del partido», resumió antes de reconocer que había habido acto de contrición colectivo: «Hemos visto vídeos y hemos tenido reuniones individuales para ver todo esto», apostilló.

Lo de Valladolid es, por ello, un examen importante para saber en que punto de rendimiento se halla el provisional Zaragoza del 20 de agosto. Con la baja importante del portero titular, Cristian Álvarez, que se quedó ayer en casa lesionado en un muslo.

Es un duelo singular, con un guardameta de viejo recuerdo enfrente, Roberto Jiménez; y un central, el marroquí El Yamiq, que también tiene ADN zaragocista, este más reciente. Y con Jim que recuerda que en la liga 13-14 estuvo en el Valladolid y no pudo evitar el descenso blanquivioleta a Segunda. Es un partido con solera de tiempos mejores de históricos con ciudades y estadios grandes detrás. Un partido de verdad, entre dos clásicos del primer escalón que ahora se dirime fuera del lugar natural. Cantinela creciente.