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Mirandés-Real Zaragoza un mes después, así han cambiado los dos equipos
Desde el aplazamiento del encuentro, programado inicialmente para el 18 de enero, ambos conjuntos han sufrido importantes mutaciones, tanto en la situación clasificatoria como en la composición de sus plantillas.
Después de un mes con el partido en un segundo plano, Mirandés y Real Zaragoza se verán las caras este miércoles en Anduva (21.00). De esta forma, los dos conjuntos alcanzarán los 28 encuentros disputados, quedando únicamente con 27 choques el Rayo y el Albacete, que continúan pendientes de disputar la segunda mitad de un enfrentamiento que fue suspendido por insultos racistas al futbolista Zozulya.
Desde aquel 18 de enero, fecha inicial en la que debía haberse disputado el duelo entre burgaleses y zaragozanos, hasta el próximo miércoles 19 de febrero, los dos equipos han sufrido importantes cambios, tanto en la estructura interna de sus plantillas como en términos puramente clasificatorios.
En este mes exacto, en el que la competición ha continuado su curso con absoluta normalidad, el Mirandés no ha sido capaz de ganar ninguno de sus cuatro compromisos. Eso sí, tampoco ha caído en ninguno. Desde la suspensión con el Zaragoza, el conjunto de Iraola ha empatado frente al Málaga (2-2), Rayo (0-0), Sporting (2-2) y Albacete (1-1).
El equipo de Víctor Fernández, por su parte, ha dado continuidad a un sobresaliente estado de forma con los triunfos frente al Numancia (1-0) y Elche (1-2), aderezados con sendos empates ante Cádiz (1-1) y Fuenlabrada (0-0). Unos números que han colocado al Zaragoza en una situación prácticamente inmejorable: en ascenso directo y con la posibilidad de colocarse a solo dos puntos del líder, siempre que consiga hacerse con el triunfo este miércoles en Anduva.
Estos resultados, además, han variado la situación clasificatoria de ambos conjuntos. Ahora, la diferencia numérica en la clasificación ha aumentado hasta los diez puntos (47-37 favorable al Zaragoza), mientras que hace un mes era de solo seis.
De Luis Suárez a El Yamiq
Si el partido de hace 30 días constituía una prueba de madurez para el Zaragoza, el encuentro de este miércoles va mucho más allá. Aquel sábado, el equipo aragonés aspiraba a dormir en puntuación de ascenso directo. Esta vez, el asunto es mucho más serio. Recién asaltada la segunda posición, un triunfo en Anduva le consolidaría en la zona más privilegiada de la tabla, abriendo una importante brecha de cuatro puntos con el tercer clasificado y situándolo a solo dos del líder.
En cuanto a nombres propios, tanto el Mirandés como el Real Zaragoza llegarán a la cita con varias e importantes ausencias en sus filas. Luis Suárez, con un edema óseo en el tobillo derecho, constituye la baja más importante de los visitantes, que tampoco podrán contar con Javi Ros, recientemente operado del menisco externo de la rodilla derecha. Por el contrario, Víctor Fernández sí tendrá a su disposición a Alberto Soro. El canterano, que iba a ser baja en el encuentro de enero por una amigdalitis, atraviesa ahora un sobresaliente estado de forma, después de anotar el pasado sábado en Elche su cuarto gol de la temporada.
En la expedición zaragozana, además, también viajarán nombres propios como El Yamiq, asentado en el centro de la defensa, que hace un mes todavía no pertenecía ni a la disciplina aragonesa.
Por su parte, el Mirandés también cuenta con sensibles bajas respecto hace un mes. Entre sanciones y lesiones, el técnico pierde a futbolistas capitales en su esquema como Guridi, Merquelanz o Marcos Andrés.
El último de los múltiples condicionantes que varían la previa del encuentro es la Copa de Rey. Con los zaragozanos apeados tras caer en octavos frente al Real Madrid, el Mirandés todavía continúa inmerso en la pelea por este título. De hecho, tras caer por la mínima en la ida frente a la Real Sociedad, los burgaleses están a solo un partido de alcanzar por primera vez en su historia una final de Copa. La eliminatoria decisiva se disputará en poco más de dos semanas.
