"Hay que ser valientes en la toma de decisiones y así nos irá mucho mejor"

Víctor Fernández habló en Tenerife. Volvió a hablar, como lo ha hecho con creciente intensidad en los últimos 15 días. El entrenador, una vez confirmado que se queda para regir el equipo en el vestuario en la temporada venidera, no ha dejado de emitir mensajes rotundos, sonoros, cargados de contenido. El zaragozano, curtido en mil batallas en el fútbol profesional, no quiere dejar ni un cabo sin atar, ni un resquicio a la sorpresa o al rozamiento futuro. Se queda, con sus condiciones, con sus ansias, con sus ilusiones y con su interés por hacer algo diferente a lo que viene haciendo el Real Zaragoza en los últimos 6 años encadenados en Segunda División. 

Cerca de la medianoche dominical tinerfeña, Víctor cerró la puerta de la liga 2018-19 con 7 candados, en las tripas del estadio, en la sala de prensa del Heliodoro Rodríguez, campo que en su día también fue suyo cuando entrenó a los canarios. Y lo hizo con otra batería de mensajes y frases para no despreciar. Para guardar en la mesilla, en la cabecera, para tenerlas a mano en los próximos 80 días, durante el verano, que se presenta álgido.

Fernández fue el emisor único. Los receptores, sin embargo, fueron varios y diversos. Y el periodista no tiene que apostillar prácticamente nada, como tampoco quien lo lea o lo escuche. Viene todo hecho en voz de Víctor. A saber:

Primer pensamiento: "De todo se aprende. Y creo que esta temporada nos ha dejado muchas enseñanzas. Yo, por lo menos, saco muchas conclusiones. Y la consecuencia es la que ya he dejado ver a la afición, a la opinión pública y, por supuesto, a mis dirigentes, a los propietarios del club: que hay mucho trabajo por delante. Mucho, mucho trabajo por delante", comenzó narrando tras la derrota por 1-0 en Tenerife. 

Segundo pensamiento: "Tenemos que estar muy centrados en lo que viene. No podemos dar ningún paso en falso. Y no debemos tener ningún tipo de temor en cualquier tipo de decisiones que tomemos. Hay que ser valientes en la toma de decisiones. Y así nos irá mucho mejor de lo que nos ha ido esta temporada", prosiguió en el adiós al suplicio de año deportivo en el seno zaragocista.

Tercer pensamiento: "Estas conclusiones las tengo. Y hay que ser valiente. No tenemos que tener miedo. Y trabajar. Y currar. Porque aquí hay mucho curro por delante. Insisto, hay que hacer borrón y cuenta nueva y hay que tomar decisiones. No nos tiene que temblar para nada el pulso si queremos tener un equipo acorde a las expectativas que tiene siempre una ciudad como Zaragoza", añadió de carrerilla.

Cuarto pensamiento: "Todo pasa por una optimización máxima, máxima, de todos los recursos que tenemos. Y no podemos equivocarnos. Lo podemos hacer muy poco o nada. Y dar un paso al frente", dijo asimismo el técnico aragonés.

Quinto pensamiento: "Cuando uno hace las cosas repetitivamente y no alcanza el éxito, uno se tiene que replantear situaciones. Y eso pasa por todos: por el entrenador, por los jugadores, por los dirigentes, etcétera. Creo que todos somos conscientes de ello", razonó cuando abordó el presente y el pasado reciente del Real Zaragoza de Segunda División.

Sexto pensamiento: "Los propietarios que han llegado ahora hicieron un esfuerzo enorme para que esto no se hundiera, para que no desapareciera. Por lo tanto, ya han hecho algo admirable, que hay que agradecer, reconocer y decirlo bien alto. Ahora bien, a partir de ahora, insisto en que las conclusiones las debemos sacar todos. Yo, en el apartado técnico. Y los dirigentes, en el apartado organizativo. Buscamos una suma de todos a la hora de configurar un equipo. Son cosas que te llevarán a acercarte o a alejarte del objetivo. Esto es así. Todo pasa por estar unidos y ser valientes", remató su tesis, aún con el partido en Tenerife caliente y sabedor de que, en el inicio real de las vacaciones de verano, el Real Zaragoza se juega mucho, todo, en el ámbito deportivo en los próximos dos meses y medio. 

Y Víctor Fernández, con este nítido planteamiento desde el puesto de entrenador, también ha dejado claro a todo el mundo y a todos los estamentos, que él no es como Víctor Muñoz, ni como Ranko Popovic, ni como Lluis Carreras, ni como Luis Milla, ni como Raúl Agné, ni como César Láinez, ni como Natxo González, ni, sobre todo, como Imanol Idiakez y Lucas Alcaraz. Todos sus antecesores en la era vigente. El del barrio Oliver, por muchas cosas, es distinto. Por sí mismo y de cara a los de alrededor. Esta rueda de prensa de Tenerife, a guardar en formol. Será referencial suceda lo que suceda a partir de ya.