Real Zaragoza

Herrera, en once frases

Durante los once meses en los que ha estado al frente del Real Zaragoza, el técnico ha adaptado su discurso a la trayectoria del equipo, irregular e impredecible.

Herrera, en once frases

Nueve meses, once frases. Una serie de declaraciones de Paco Herrera que, desde que fue presentado hasta la derrota de este domingo frente a la Ponferradina, la que le ha costado el puesto, definen su trayectoria al frente del Real Zaragoza. Momentos de optimismo y de pesimismo, cambios de opinión, suaves críticas a la confección de la plantilla, mensajes indirectos a la directiva, alusiones a los problemas extradeportivos del club... Todo esto ha dejado Paco Herrera en la hemeroteca tras pasar a convertirse en pasado del Real Zaragoza.


20 junio: "Mi objetivo es devolver al Real Zaragoza a Primera"


El día de su presentación como entrenador del Real Zaragoza, el 20 de junio de 2013, Paco Herrera llegaba al Real Zaragoza con optimismo y con la seguridad de que el objetivo del ascenso era posible. "No se puede esconder que el objetivo es el ascenso. No sé si lo voy a conseguir, pero espero que la gente se divierta con el juego del equipo", aseguraba el técnico, quien también alababa al club: "Vengo a un gran equipo como institución y muchos querrían estar en mi sitio. Mi objetivo es devolver al Real Zaragoza a Primera".


16 de agosto: "Todavía estamos lejos de donde tenemos que llegar"


Dos meses después de su llegada a la capital aragonesa, cuando la temporada ya estaba a punto de comenzar y el primer rival del Real Zaragoza, el Hércules, ya asomaba por el horizonte, Paco Herrera avaluaba el estado del equipo y sus pretensiones para la campaña. Esto decía el técnico el pasado 16 de agosto: "Hemos avanzado pero todavía estamos un poco lejos de donde tenemos que llegar. Lo que me preocupa no es la victoria o la derrota, es que merezcamos ganar porque si lo merecemos es que has hecho muchas cosas bien y el equipo va a ir hacia arriba. Si juegas mal y ganas, eso al final se cae. No busco la excelencia, que es muy atrevido, pero si un equipo fiable".


8 de septiembre: "Somos el Racing de Santander del año pasado"


El optimismo con el que el Real Zaragoza comenzaba la temporada no tardó en difuminarse en medio de una serie de resultados negativos. El equipo de Herrera no había ganado ninguno de los tres primeros partidos y, tras la derrota ante el Lugo (0-1) y el cuarto partido sin lograr la victoria, el entrenador comparó al club aragonés con el Racing de Santander, que descendió a Segunda B tan solo un año después de bajar de Primera a Segunda. "Somos el Racing de Santander del año pasado. Aspiraba a Primera y se encontró así".


30 de noviembre: "Los jugadores están eufóricos"


La victoria del Real Zaragoza en Las Palmas (0-1) supuso una importante inyección de ánimo para Paco Herrera y sus jugadores. Quizás demasiada, por que tan solo era la segunda victoria consecutiva del equipo tras cinco partidos (Deportivo, Alavés, Eibar, Numancia y Jaén) sin ganar. El 30 de noviembre, tras ganar en el Estadio Insular, el entrenador describía así el estado de ánimo del vestuario: "Los jugadores están eufóricos. El equipo empieza a creer. Empieza a ver que podemos salir de esta situación, que es un poco agobiante. Está claro que el Real Zaragoza no debe estar en estas circunstancias y, por ello, ganar en estos campos te refuerza".


1 de febrero: "Estoy muy contento con la plantilla que tengo"


Tras el cierre del mercado invernal de fichajes e inmerso en la mejor racha del Real Zaragoza en lo que llevamos de temporada, Paco Herrera le quitaba hierro al hecho de que el equipo, lejos de reforzarse, se hubiera debilitado. Solo llegó Arzo, y el entrenador perdió a tres jugadores (José Mari, Paredes y Movilla) por decisión de la dirección general del club.


"Estoy muy contento con la plantilla que tengo. Un delantero nos hubiera venido bien; un centrocampista nos hubiera venido bien; un central nos hubiera venido bien. Pero cualquier fichaje tendría que haber sido muy bueno para encajar aquí", indicaba el técnico, quien sí reconocía que las lesiones podrían causar problemas: "Debería ser suficiente para afrontar la temporada con garantías, pero si hay alguna lesión podríamos estar un poco justos. Si hay una desgracia o dos en determinadas posiciones nos acordaremos de que somos una plantilla corta".


8 de febrero: "Hay posiciones que no tenemos solucionadas"


Tan solo una semana después de asegurar que estaba "muy contento" con su plantilla, Paco Herrera apuntaba a las lesiones y a la falta de recambios como una de las principales causas de que el Real Zaragoza no lograra ganar en Lugo (1-0) y hubiese encadenado la segunda derrota consecutiva, tras la del Barcelona B (0-2) en La Romareda. "Nos está pasando lo mismo que en la primera vuelta, y vuelve a coincidir con las lesiones. Cuando no tenemos a todo el grupo, no somos suficientes, no llegamos. Hay posiciones que no tenemos solucionadas, que no tenemos para cubrir, a pesar de que quien lo está haciendo lo está haciendo con orgullo y trabajo, pero no damos el 100% de lo que podemos dar".


15 de febrero: "Nuestro ambiente no invita a nada"


Tras la derrota contra el Tenerife, el 15 de febrero, Paco Herrera abordaba el tema de los problemas extradeportivos del Real Zaragoza. Antes de viajar a la isla, Moisés y Pitarch habían hablado con él para impedirle que convocara a Paredes y el entrenador explotó tras el empate en el Heliodoro Rodríguez. "Estoy fastidiado porque nuestro ambiente no invita a nada. Cuesta mucho así. Se siente pesimismo y siempre parece que va a pasar esto o lo otro. No se habla de fútbol. Todo eso lo estamos generando nosotros. Estoy molesto con esto, no con mi equipo", denunció el entrenador, quien también reconoció su parte de culpa: "Veo muchos problemas, pero también muchas soluciones. Ocurre que me equivoco. Que esas soluciones que pongo en práctica no funcionan. Por eso estoy fastidiado".


21 de febrero: "Solo debemos mirar hacia arriba"


Después de tres partidos consecutivos sin ganar que habían acabado con la buena racha del mes de enero, Paco Herrera se reafirmaba en sus aspiraciones y se negaba a mirar hacia abajo en la clasificación, algo que sí tuvo que hacer con el transcurrir de las semanas. Antes del partido contra el Real Madrid Castilla, el técnico aseguraba: "No miro hacia atrás en la clasificación porque confío ciegamente que solo debemos mirar hacia arriba. Será por la confianza que tengo pero no valoro mirar hacia atrás".


1 de marzo: "Si no les gusta, que me echen"


Tras el empate contra el Recreativo de Huelva, un partido que el Real Zaragoza mereció ganar y que acabó empatando por un penalti absurdo cometido por Abraham en el tiempo añadido, Paco Herrera explotó. Ya llevaba varias semanas cuestionado, y una pregunta sobre su futuro acabó con una especie de reto hacia la directiva: "Yo no puedo estar con esta situación todas las semanas. No puede depender de si empatamos o no. Si no les gusta, que me echen. Si no están convencidos de mi trabajo, que me echen".


7 de marzo: "Creo que vamos a ganar los 14 partidos que nos quedan"


Pocos días tardó Paco Herrera en recuperar el ánimo tras el partido de Huelva, y antes del duelo contra el Mallorca se volvía a mostrar con fuerzas y confiado. Tanto, que aseguró que creía que su equipo iba a ganar todos los partidos que quedaban antes del final de la liga: "Yo no creo que vayamos a perder, pero mi sensación no es para este partido, sino para los 14. Y yo creo que vamos a ganar los 14 partidos. Es mi obligación pensar así. Lo que tenga que pasar, pasará, pero yo espero ganar para que no ocurra", aseguraba el técnico, quien no ganó ni ese partido ni el de Ponferrada, que le ha costado la destitución.


16 de marzo: "Tenemos que ganar tres partidos para salvarnos"


La derrota en Ponferrada dejó a Paco Herrera casi destituido -la decisión se ha tomado este lunes- y una declaración del técnico que sirve para situar perfectamente el estado y la situación en la que ha dejado al equipo. Lejos de aquel "mi objetivo es devolver al Real Zaragoza a Primera", el entrenador afrontaba la cercanía de los puestos de descenso a Segunda B: "Yo creo que el equipo, de 12 partidos, tiene que ganar tres para salvarse, y en ese aspecto estoy tranquilo. Pero hay gente en el entorno que no lo está", indicaba Herrera, quien también se mostraba escéptico con una posible revolución: "¿Qué revolución podemos hacer? Con jugadores de Tercera, sería un error. Y la gente que te queda es la misma cada semana". Esta sería su última rueda de prensa como entrenador del Real Zaragoza.