baloncesto
El Casademont pierde ante el Obradoiro y da un paso en falso inesperado (78-79)
Mekowulu dispuso de dos tiros libres, a un segundo de la conclusión, para haber igualado el partido; pero erró su segundo lanzamiento.
El Casademont es un equipo imprevisible, inconstante e irregular. Y después de superar al poderoso Barcelona en la anterior jornada de la Liga Endesa, claudicó este sábado en el pabellón Príncipe Felipe ante el Obradoiro (78-79), lastrado sobre todo por su impericia ofensiva (41 puntos a la media hora) y su deficiente lectura del juego. Además, el equipo gallego es un bloque más enérgico y ordenado, mucho más cuajado y seguro de sus fuerzas, y contó en el segundo periodo con la irrupción de Kassius Robertson (28 tantos facturados, todos en la segunda mitad).
El primer tiempo fue lento, áspero, trabado, por momentos desesperante por el desacierto de los contendientes en sus acciones de ataque (25-29 al descanso). No hubo ritmo, ni acierto, ni alegría, ni fluidez. El equipo local salió encogido y atenazado, sin la determinación que demandaba el partido. Y el Obradoiro rezumó agresividad por todos los costados: ordenado y disciplinado atrás, siempre presto al combate, supo neutralizar con perseverancia y oficio la mayoría de las acometidas del equipo local.
En ataque, el Casademont se quedó sin respuestas, sobre todo en los 20 primeros minutos del duelo. Pese a todo, los zaragozanos tuvieron la opción de llevar el choque a la prórroga, a un segundo de la conclusión, con dos tiros libres de Christian Mekowulu, quien regresó a las pistas tras casi dos meses de inactividad. El pívot sufrió una fractura de escafoides, de la que fue intervenido quirúrgicamente, y su última actuación se remontaba al partido del pasado 8 de enero, ante el Girona. Anotó el primero, pero su segundo lanzamiento fue repelido por el aro. Ahí murieron las esperanzas del equipo aragonés, que remó con tenacidad pero se quedó sin premio.
El Obradorio se manejó de inicio con paciencia, con las pausas preceptivas, y generó canastas fáciles en sus primeros ataques. El Casademont no sólo era incapaz de contener a su adversario, sino que apenas hallaba situaciones ventajosas para anotar -2 aciertos de 10 intentos en los tiros de campo-. En el ecuador del primer acto, el equipo gallego ya había edificado una sólida renta en el marcador (4-13), con las acciones de Thomas Scrubb, Westermann y Blazevic. El preparador de los locales, Porfirio Fisac, tuvo que detener el encuentro para corregir las deficiencias de su equipo.
El tiempo muerto no modificó el guión. El cuadro aragonés siguió atacando con dudas, con numerosas precipitaciones en su juego, y prolongó su desatino: cuatro puntos en los siete primeros minutos del choque.
Todo cambió, sin embargo, con las primeras rotaciones. La entrada de Aday Mara -siempre intimidante- y de Stefan Jovic -brillante en la dirección- enseguida le reportó grandes réditos al conjunto zaragozano, que recortó diferencias con un 8-0 de parcial (12-14). Ahora fue Moncho Fernández, el técnico de los visitantes, quien tuvo que parar el partido.
A partir de ahí, el Obradoiro recuperó el pulso. Y de nuevo encontró buenas posiciones de tiro, lo que le permitió aumentar su ventaja en los primeros compases del segundo acto (13-21). Aday Mara, con una canasta bajo el aro, y Jessup y Wright, desde el triple, iniciaron al remontada. Y poco después, el Casademont se puso por fin por delante en el marcador, tras una jugada de Mekowulu y una antideportiva de Westermann sobre Chris Wright (25-24). Sin embargo, el equipo visitante se sobrepuso, justo antes del descanso, con cinco puntos consecutivos de Thomas Scrubb (25-29).
El Casademont fue mucho más incisivo en la reanudación. E igualó la contienda con prontitud, tras las canastas de Hlinason y Wright, y dos tiros libres de Howard Sant-Roos (31-31). Apareció entonces Robertson -inédito en la primera mitad-, para impulsar a su equipo con diez puntos consecutivos: tres triples convertidos, el último con un tiro adicional por la falta de Chris Wright (34-43). Y después del tiempo muerto de Porfirio Fisac, Thomas Scrubb amplió la distancia con otros dos lanzamientos desde el perímetro (36-51). A la media hora, el Obradoiro avanzaba con paso firme hacia la victoria (41-57), reforzado por la sobresaliente exhibición ofensiva de Kassius Robertson -17 puntos en el tercer cuarto-.
En el tramo definitivo, el Casademont se resistió a enarbolar la bandera blanca. Redujo distancias con un parcial de 11-3, gracias a las canastas de Aday Mara, Jessup y Ponitka, para seguir creyendo a siete minutos de la conclusión (52-60). A partir de ahí, del intercambio de golpes salió favorecido el Obradorio, que nunca se descompuso y que tuvo, además, un gran asidero al que agarrarse en la figura de Robertson: el canadiense finalizó la contienda con 28 puntos en su haber, todos ellos anotados en el segundo periodo, y resultó capital en la victoria de los gallegos.
El Casademont nunca bajó los brazos, y se situó a sólo un punto tras una canasta de Mekowulu en la pintura, dos tiros libres de Santi Yusta y un certero triple de Justinian Jessup (75-76). Restaba un minuto para el final. Aún tuvo un lanzamiento, a priori fácil, de Mekowulu bajo el aro para haberse puesto por delante en el marcador. Sin embargo, erró el nigeriano, y Thomas Scrubb elevó la renta de los gallegos desde la línea de personal (75-78). Jovic recortó distancias, y Mekowulu dispuso de dos tiros libres después, a falta de un solo segundo, para haber igualado el partido; pero falló su segundo lanzamiento.
- Ficha técnica:
78 - Casademont Zaragoza (13+12+16+37): Wright (7), Sant-Roos (5), Yusta (7), Cruz (-), Hlinason (4) -cinco inicial- Jessup (20), Ponitka (5), Mara (15), Mekowulu (5), Simanic (3) y Jovic (7).
79 - Monbus Obradoiro (16+13+28+22): Westermann (5), Robertson (28), Thomas Scrubb (15), Vicedo (2), Blazevic (8) -cinco inicial- Zurbriggen (3), Magnay (4), Phil Scrubb (11), Guerrero (3), Muñoz (-) y Suárez (-).
Arbitros: Rafael Serrano, Sánchez Sixto y Vicente Martínez. Excluyeron por personales a Guerrero (m.33) y Blazevic (m.35).
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 22 de Liga disputado en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza ante 6.142 espectadores.
