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La aragonesa Leyre Urdiain se cuelga el bronce tras su mejor actuación con España

Con 14 puntos y 9 rebotes, la jugadora del Casademont contribuyó a la victoria ante Francia (47-39) en el Campeonato del Mundo femenino sub-17 disputado en México.

La celebración del equipo tras el pitido final en León, México.
FEB

Fue la tarde soñada para la zaragozana Leyre Urdiain: no solo se colgó al cuello la medalla de bronces del Mundial sub-17 junto a sus compañeras de la selección española, sino que -además- firmó un partido completísimo con 14 puntos y 9 rebotes en los más de 30 minutos que estuvo en la cancha. La selección española de baloncesto sub-17 femenino se impuso de madrugada a Francia por 47-39, con una brillante actuación del jovencísimo talento del Casademont Zaragoza.

El partido entre los dos equipos perdedores de las semifinales (ante Estados Unidos y Canadá) estuvo marcado por los errores de las dos selecciones, lo que deparó un marcador muy bajo en comparación del nivel que ambos habían ofrecido hasta ahora.

El encuentro estaba siendo mucho peor, si cabe, antes del descanso y ya en el tercer cuarto las españolas se serenaron más y consiguieron una renta que ha sido definitiva para darles el bronce.

Los nervios y, posiblemente, la desilusión de los dos equipos marcaron el juego en el inicio, especialmente con porcentajes de lanzamiento bajos, sobre todo en el triple; Francia sacó partido a su físico y logró irse por delante en esos diez minutos (14-18).

Pero a partir de entonces el choque se estropeó por los continuos errores y España comprendió que si quería mejorar debía hacerlo desde la defensa y ajustó mucho mejor sus emparejamientos para remontar y llegar al descanso por delante (28-24). Urdiain estuvo brillante también en el aspecto defensivo, frenando a sus oponentes. 

Españolas y francesas regresaron al partido tras el descanso más atenazadas todavía y por ello el tercer cuarto fue una sucesión de errores que terminó con un 6-5 de parcial (34-29) que no solo dejaba todo abierto, sino que evidenciaba el que triunfo sería para el primer equipo que "enderezara" algo su rumbo.

Eso es lo que hizo España en el último periodo, en el que su defensa "secó" a la tiradoras francesas y se colocó con un 41-31 en tres minutos que era casi definitivo en un partido de estas características; además, poco después, solo con dos canastas España colocó un 45-31 imposible de levantar.

Así, España dedicó algo más de cuatro minutos a administrar su renta y finalmente lo consiguió para lograr una medalla de bronce merecida, en un campeonato en el que solo ha perdido un partido, su semifinal ante Canadá.

Sara Okeke no estuvo a su nivel, y a Adriana Díaz y a Gina García no les entraban los tiros… pero España demostró que es un equipo muy competitivo. "El partido de Francia fue el de Inés García Monje, autora de 15 puntos y 10 rebotes. Y también el de Leyre Urdiain, que firmó su mejor actuación, con 14 puntos. E incluso Mireya Sanz, ese factor X que ha sido clave en muchos momentos del torneo", narran desde la Federación de Baloncesto.