La Copa Asobal devuelve a la élite a Zaragoza
Alrededor de 3.000 aficionados presenciaron las semifinales. Barça y Bidasoa disputan este domingo la final.
Fue una jornada festiva para el deporte zaragozano. El balonmano de élite regresó, por fin, a la capital aragonesa, después de más seis años de ausencia, con la celebración ayer de las semifinales de la Copa Asobal. El Barcelona, tras batir con autoridad al Logroño, y el Bidasoa Irún, que superó al Granollers en el partido inaugural, son los dos conjuntos que lucharán hoy por el título (18.00) de una competición que, durante todo el fin de semana, ha reunido en el pabellón Príncipe Felipe a los cuatro mejores conjuntos del panorama nacional. Por ello, la respuesta del público resultó formidable: más de 3.000 espectadores asistieron ayer en la jornada inaugural del torneo, quienes disfrutaron de un gran espectáculo por la entidad de los participantes y las acciones de gran brillantez que se produjeron en ambos encuentros.
Hubo una amplia representación, sobre todo, de los aficionados de Irún, quienes se dejaron oír en todo momento y que disfrutaron sobremanera con la clasificación de su equipo para la final. En el choque fue controlado por el cuadro catalán hasta el minuto 34. Sin embargo, el cambio de portero -Ledo salió por el exinternacional Sierra- y los goles de Iñaki Cavero modificaron el guion. El exterior fue designado mejor jugador del encuentro.
Mucho más fácil resultó la clasificación del Barcelona, que superó al Logroño en un encuentro que dominó de principio a fin. El conjunto azulgrana cuenta con numerosos argumentos en sus filas, y es el gran favorito para conquistar la Copa Asobal.
Reconocimientos
Entre los dos partidos de semifinales, la Asobal, a través de su presidente, Servando Revuelta, y del concejal de Ayuntamiento de Zaragoza Ángel Loren, reconocieron con la insignia de oro de la organización a quienes han contribuido a hacer grande el balonmano en Aragón. Así, saltaron al círculo central Fernando de Andrés, Manolo Novales, Fernando Bolea, Pablo Giménez, Amadeo Sorli, Rafa Mainer -hijo de Óscar Mainer-, Marco Mira, Pablo Hernández, Jorge Gómez, Toño Cartón, Alberto Val e Ibai Cano, así como los colegiados Félix Brocate, Gregorio Muro y Rodríguez Murcia, el entrenador José Francisco Nolasco y el presidente Pachi Giné.
El balonmano de élite regresó a Zaragoza tras más de seis años de ausencia. De hecho, no había un partido de primer nivel en el pabellón Príncipe Felipe desde la desaparición del BM Aragón en 2016. Después de una gran jornada, hoy llega el plato fuerte con la celebración de la final: Barcelona y Bidasoa lucharán por el título.