Las 11 piscinas de Zaragoza que tienen zona de chapoteo para bebés
Solo 11 de las 22 piscinas municipales de Zaragoza poseen zona de chapoteo para los más pequeños.
La capital aragonesa cuenta con 22 centros deportivos distribuidos por toda la ciudad para disfrutar del sol y del agua durante el verano. Según el Ayuntamiento de Zaragoza, Zaragoza es la capital española con mayor número de piscinas municipales por habitantes, con una red de 22 instalaciones distribuidas en los distritos y barrios rurales. Madrid cuenta con 18 piscinas municipales, Sevilla 4, Valencia 8 y Málaga tan solo una.
Actualmente, tan solo 11 de las 22 piscinas municipales que hay en Zaragoza tienen una zona destinada al chapoteo de los más pequeños.
El chapoteo puede actuar como preludio a la matronatación, que según Safante (centro especializado en fisioterapia acuática), es una actividad muy positiva para los bebés, ya que les aporta grandes beneficios, como la relajación, el incremento de la concentración y percepción, aumenta su capacidad respiratoria y refuerza el vínculo con sus padres.
Estas son las 11 piscinas de Zaragoza que poseen zona de chapoteo:
- CDM Torrero: de 188 m2, con fondo de 0,5 m., con un volumen de 94 m3.
- CDM Santa Isabel: de 64 m2, con un fondo de 0,3, con un volumen de 13 m3.
- CDM San Gregorio: de 72 m2, con fondo de 0,2, con un volumen de 18 m3
- CDM Monzalbarba: de 60 m2, con fondo de 0,2 m., con un volumen de 6m3.
- CDM Miralbueno: de 6 x 12 m., con fondo de 0,40 a 0,60 m., con un volumen de 7,2 m3.
- CDM La Jota: de 11 x 5 m, con fondo de 0,30 m, con un volumen de 12 m3.
- CDM La Granja: de 8 x 8 m, con fondo de 0,30 m., con un volumen de 10 m3.
- CDM Delicias: de 380 m2, con fondo de 0 a 0,50 m.
- CDM Alejandro Pérez Blanque: de 5.50 m de diámetro, con una profundidad de 0.30 m, con un volumen de 30 m3.
- CDM Eduardo Espiau Ramírez (Peñaflor): de 10 x 5 m., con fondo de 0,65 a 0,75 m., y un volumen de 34,35 m3.
- CDM Actur: de 8 x 8 m., con fondo de 0,3 m. y con un volumen de 30 m3.
Qué debemos tener en cuenta
Según Antonio Bretones, diplomado en Fisioterapia, es conveniente esperar hasta los cuatro meses de vida para realizar actividades como esta, ya que a esta edad termina de madurar el sistema inmunológico del bebé y las posibilidades de contraer resfriados e infecciones como la otitis se reducen notablemente.
Por otra parte, siempre que un bebé esté en el agua debe tener a un adulto cerca por si sufriese algún percance.
