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Los taxistas de Zaragoza se rebelan: hacen una marcha lenta y endurecerán la protesta la semana que viene

La Asociación Provincial de Auto-Taxi carga con Uber y Cabify, pide seguros más baratos y un trato digno en la Estación Delicias. 

Asamblea del sector de taxi celebrada este lunes en el Palacio de Congresos de Zaragoza.
Asamblea del sector de taxi celebrada este lunes en el Palacio de Congresos de Zaragoza.
Francisco Jiménez

"Juntos somos más fuertes". Así piden los miembros de la Asociación Provincial de Auto-Taxi de Zaragoza a los profesionales de la capital aragonesa que se unan a la "marcha lenta" con la que este martes por la mañana han querido mostrar su hartazgo a toda la ciudad. La protesta finalizará en el Paseo de María Agustín 36, frente al edificio Pignatelli, sede de la DGA. 

Ha sido la de este martes el preludio de unas protestas que van a ir endureciendo hasta que les escuchen desde las instituciones. Porque la situación es "insostenible". Lo denuncia el presidente de la asociación, Miguel Ángel Perdiguero, que denuncia que durante el último fin de semana detectaron "35 VTC ilegales haciendo servicios en Zaragoza". Los taxistas han remitido solicitudes al Gobierno de Aragón, al Ayuntamiento de Zaragoza y al delegado de la Policía Local para mantener una reunión tripartita y buscar soluciones para el problema. "Queremos que lo regulen", reclama Perdiguero, que cree que al ser del mismo color político la DGA y el Consistorio debería haber menos problemas a la hora de hacerlo.

En la asamblea que celebraron este lunes en la cooperativa, los ánimos seguían caldeados. Ya dejaron constancia de su "'cabreo'" el pasado 10 de junio, cuando se reunieron cientos de profesionales en el Palacio de Congresos para exponen sus principales preocupaciones: la incidencia de las VTC en su negocio. 

No son Uber y Cabify su único problema. La subida de los seguros de los vehículos pone en riesgo la viabilidad de su negocio. Explica a modo de ejemplo Perdiguero que, en los casos más favorables, han pasado de 800 a 1.300 euros, aunque hay quien paga 3.200 y, en el caso de gente joven que accede ahora al sector, hasta 3.500. Por asegurar un Tesla se llegan a pedir 7.000 euros. 

Se sienten maltratados los taxistas en la Estación Delicias, donde se superan en verano los 40 grados y los baños son de pago. En la cuarta ciudad de España, Zaragoza, hay sitio para 80 coches, cuando llegan dos trenes con 300 personas. "Los pasajeros tienen que esperar porque no hay taxis suficientes", critica. Ni siquiera ha admitido negociar la empresa que gestiona los aseos aplicar un descuento para que les resulte más barato. 

El recorrido de la marcha lenta

Los taxis han salido a las 10.00 de la cooperativa, en dirección al hospital Clínico y han formado una caravana. Han circulado por alcalde Gómez Laguna, Vía Hispanidad, avenida de Navarra, calle Rioja, avenida de la Expo 2008, Pablo Gargallo, Paseo de Echegaray y Caballero, calle Coso, Alonso V, paseo de La Mina y Paseo de la Constitución, para cerrar la marcha en el paseo de María Agustín 36.

Si las instituciones no atienden sus reivindicaciones, las protestas irán a más. La semana que viene, plantean que la protesta recorra el centro de la ciudad y que, al acabar, empiece un paro de ocho o doce horas. No descartan acciones en las vías de acceso a la plataforma logística Plaza, el aeropuerto de Zaragoza o la Estación Delicias. Es plan que se paralizará, en todo caso, si se abre el diálogo. 

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