El derribo del edificio de la explanada de la estación de Calatayud en el que falleció un operario el pasado mes de julio se ha retomado esta semana. Lo ha hecho una vez que tanto el Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral como el juzgado y la inspección de trabajo han dado el visto bueno a la planificación de las actuaciones. De esta forma, este lunes, mediante una grúa de grandes dimensiones, se ha retirado la máquina que quedó atrapada bajo los escombros y se recolocará el vallado de seguridad. Asimismo, se colocarán elementos de para evitar daños sobre la capilla adyacente al inmueble, que cuenta con un grado de protección integral en el PGOU de la ciudad.

A finales de agosto de 2023, la junta de gobierno del Ayuntamiento dio el visto bueno para la contratación de la dirección de los trabajos a un arquitecto externo, por valor de 5.747 euros. Y la semana pasada, el mismo órgano aprobó el plan de seguridad y salud. Todo ello lo asume el Consistorio de manera subsidiaria, una vez que no lo realizan los propietarios. Así, entre las primeras labores también se incluye una intervención para ejecutar el desamiantado de las canalizaciones de fibrocemento, canalones y bajantes visibles desde el exterior.

Las labores las acometerá la empresa local Obras y Construcciones RRD, adjudicataria de los trabajos por vía de urgencia ya el verano pasado ante la situación de peligro que afectaba al inmueble, una vez que se vio afectado por un incendio y la declaración de ruina inminente apoyada en un informe de los bomberos de la Diputación de Zaragoza. Según la documentación, el proceso se acometerá conforme al plan de derribo, que contempla un plazo de ejecución total de ocho semanas.

Durante los últimos días, se han registrado accesos no autorizados al interior del edificio, donde ya se declaró un fuego a principios de julio, cuando se encontraba ocupado por dos personas. La estructura está afectada parcialmente por la retirada de materiales que comenzó a realizarse hace diez meses, lo que también se ha traducido en algún desprendimiento de manera puntual sin causar daños materiales.

El derribo se inició el 24 de julio y, un día después, en torno a las 10.00, se registró el accidente cuando "parte de la estructura del edificio" cayó encima de la máquina excavadora del operario que había sido subcontratado para ejecutar el despiece del inmueble.