La pandemia acentúa los problemas de alcoholismo en los hogares zaragozanos

La pandemia ha hecho visibles los problemas de alcoholismo en el seno de los hogares. El confinamiento ha aumentado el número de personas que han manifestado esta adicción en el ámbito familiar, frente al social, donde era lo habitual, lo que ha llevado a sus convivientes a alertar de estas patologías y solicitar ayuda. Una nueva pauta de consumo que se ha dejado sentir en las demandas que recibió durante el año pasado la Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza (CSZ).

Sobre esta tendencia alertó este jueves el director gerente de la entidad, Jesús Sánchez, durante la presentación de la memoria anual, acto en el que estuvo acompañado por la presidenta del Comité Ejecutivo de CSZ, Pilar Aznar. En el año del coronavirus, el Centro de Solidaridad atendió a 1.110 personas (990 hombres y 200 mujeres), una cifra que se eleva a 1.486 entre usuarios y familiares.

Sánchez subrayó que la cantidad de intervenciones se han mantenido "estables" en comparación a 2019 a pesar de la crisis sanitaria pudiendo conservar, en muchos casos, la atención presencial que tanto han valorado los pacientes. La cocaína vuelve a desbancar al alcohol como motivo de demanda de tratamiento, aunque este le sigue muy de cerca. Así, se registraron 248 casos por la sustancia psicoactiva y 243 por bebidas alcohólicas.

Además, Sánchez destacó el "ejercicio de responsabilidad" y el "comportamiento ejemplar" durante los meses más duros de los usuarios de la comunidad terapéutica residencial Proyecto Hombre, la única que existe en Aragón y que ha mantenido sus 45 plazas ocupadas. Desde hace años las personas que ingresan en el centro lo hacen principalmente por alcoholismo, aunque cada vez son más los que piden tratarse por estar enganchados a la cocaína y los adicciones a ambas drogas resultan "muy parejas". Un alcohólico puede llegar a tardar hasta 15 años en asumir su dependencia, por lo que llegan "muy deteriorados a nivel físico y cognitivo". Después de siete meses, que es el tiempo medio de estancia en Proyecto Hombre, su "mejoría es impresionante".

Crece el alcoholismo femenino

El estigma del alcoholismo entre las mujeres es otra de las tendencias más alarmantes que el Centro de Solidaridad de Zaragoza ha venido detectado en el último lustro. Muchas suelen vivir en soledad y su adicción se asocia a situaciones de violencia de género y depresión. El año pasado se sometieron a terapia 72 mujeres, un 5% más que en 2019. Las dos Unidades de Atención y Seguimiento de las Adicciones que gestiona la Fundación llevaron a cabo 1.013 atenciones ambulatorias.

La crisis sanitaria ha reducido las actividades de prevención, especialmente en las asociaciones de madres y padres de colegios. También ha dificultado la labor en la prisión de Zuera, pese a lo cual se atendió 75 internos y 13 fueron derivados a la entidad.

Por lo que respecta a los jóvenes, el Centro de Solidaridad atendió a 114 de entre 11 y 24 años, principalmente por abuso de cannabis y alcohol y otros "comportamientos de riesgo". Acerca de la ludopatía a estas edades, Sánchez explicó que están emergiendo algunas patologías relacionadas con el "uso inadecuado" de las pantallas y redes sociales y saltan "alarmas" en las familias por el juego ‘online’ y la pornografía, aunque los casos se tratan desde un "punto de vista más global".

Por su parte, la presidenta del Centro de Solidaridad reconoció que los "recursos económicos son escasos" e hizo una llamada a la colaboración para aumentar los "insuficientes" ingresos. Los gastos extraordinarios por las medidas covid supusieron un desembolso extra de 10.435 euros.