situación de la hostelería
"Las demás crisis las hemos podido apalear, pero esta vez no depende de nosotros"
Dora Gracia, de Doña Casta, El Balcón y 7 Golpes, cree que la hostelería atraviesa una situación "alarmante" que nada tiene que ver con la crisis de hace una década
![Dora Gracia, en una mesa exterior de Doña Casta, ayer.](https://imagenes.heraldo.es/files/image_990_556/uploads/imagenes/2020/08/15/dora-gracia.jpeg)
Con el histórico Tubo casi irreconocible, los bares asentados en estas calles del Casco Histórico se afanan en seguir funcionando, a trompicones, pese a los obstáculos que la pandemia del coronavirus no para de poner en el camino. La situación ha cambiado mucho en muy pocos meses, y nada tiene que ver esta crisis con la que se sufrió hace un década. En esta ocasión la incertidumbre lo tiñe todo. "Es muy alarmante", lamenta Dora Gracia, cocinera y propietaria de tres negocios en la zona.
"Las demás crisis las hemos podido apalear, con ofertas y echándole imaginación, pero esta vez no depende de nosotros", apunta. Según cuenta, el nivel de venta conjunto en Doña Casta, El Balcón del Tubo y 7 Golpes se encuentra un 80% por debajo de lo que era habitual antes de la llegada de la covid. "Y exagero", añade con preocupación. De hecho, el último ni siquiera ha llegado a abrir de nuevo sus puertas.
De los 40 empleados que forman la plantilla de estos establecimientos, solo están en activo 12, el resto siguen en ERTE a la espera de que la afluencia mejore. "No podemos sacarlos –explica–. Es un desastre total". "Los meses de julio y agosto antes eran muy buenos. Zaragoza se quedaba vacía pero venía todo el mundo", recuerda Gracia, que cree que la prohibición de fumar va a servir para perder aun más clientela.
Además, pide poder volver a usar la barra, tan clave en locales como los suyos, ya que, enfatiza, "los bares nunca habían estado tan limpios y desinfectados".