Los abogados de Vox en el juicio contra los líderes independentistas, Javier Ortega-Smith y Pedro Fernández, clamaron este viernes en Zaragoza contra PP, PSOE y Cs, a los que acusaron de "negociar con la soberanía nacional por un puñado de votos cuando tenían que aprobar los presupuestos". "Han puesto la soberanía nacional al servicio de quienes querían acabar con la nación", afirmó Ortega-Smith, que también es secretario general de la formación de extrema derecha.

Ante cerca de un millar de seguidores y con menos público del que esperaban, los dos líderes de Vox aseguraron que su causa, la que se sigue en el Tribunal Supremo, "es la de todos los españoles". No hicieron muchas más menciones al proceso judicial, ante los aplausos de los asistentes, que gritaban "Puigdemont, a prisión". Con su habitual discurso incendiario, clamaron contra PSOE, PP y Cs, especialmente contra los populares, a quienes les endosaron el latiguillo de "derechita cobarde" que repiten en todos sus mítines.

En su lucha por hacerse con el electorado más conservador, Ortega-Smith tachó de "cobarde" al PP por haber aplicado un "miserable artículo 155", por "no oponerse al supremacismo de género que convierte a los hombres en presuntos culpables" o por "abandonar a miles de niños a los que no se deje hablar español en el patio del colegio", en comunidades autónomas como Galicia, País Vasco, Valencia o Baleares. "No plantasteis cara al separatismo", denunció Ortega-Smith.

También atacó a Aznar, que hace unos días aseguró que los líderes de Vox no le dicen "a la cara derechita cobarde" porque no le "aguantan la mirada". "Fuisteis cobardes y eso se lo digo a Aznar, que sacó la Guardia Civil de Cataluña", aseguró. Criticó al PP por "no defender las fronteras" o no derogar el impuesto de Sucesiones. "Os dieron una mayoría absoluta y la desperdiciasteis porque solo os importaba el negocio de la Gürtel y la Púnica", clamó Ortega-Smith.

Además, cargó contra el presidente Pedro Sánchez, a quien calificó de "personaje siniestro apoyado por los amigos de los terroristas, los totalitarios y los golpistas". A su juicio, existe una amenaza separatista que "ha tenido la connivencia y tolerancia del Gobierno de la Nación". Con referencias a Agustina de Aragón, Ortega-Smith afirmó también que esa «amenaza a la soberanía nacional» no solo es interna, sino también externa. Alertó de una supuesta "invasión islamista promovida desde los países que odian la libertad". Tras el mitin defendió construir unos muros de hormigón en Ceuta y Melilla "lo suficientemente altos para no necesitar concertinas".

Pedro Fernández, que además de abogado en el juicio del ‘procés’ es candidato al Congreso por Zaragoza, defendió "arreglar" el problema hidrológico para que no haya "peleas territoriales". "El agua es de todos los españoles", dijo. Se refirió a la despoblación y defendió tomar medidas "para que las personas que nacen en un sitio puedan vivir siempre allí", aunque no concretó propuestas.

Propuso la "suspensión automática" de la autonomía de Cataluña "para que acaben las reclamaciones absurdas sobre el patrimonio de los aragoneses" o la ilegalización de los partidos independentistas. "La CUP se está colando en Aragón", aseguró Fernández. Pidió también suprimir los impuestos de Sucesiones, Transmisiones y Patrimonio, así como las subvenciones a los partidos. Pero sobre todo atacó al candidato de Podemos, Pablo Echenique, a quien acusó de "cobrar de regímenes autoritarios" o haber mantenido "en régimen de semiesclavitud a su asistente".