Zaragoza

Un grupo de menores encerró en Nochebuena a la trabajadora social que les atiende en Borja

El Ayuntamiento pedirá a la DGA suspender el programa de acogimiento de menores extranjeros no acompañados.

Borja

Un incidente acaecido durante la pasada Nochebuena con una trabajadora social de la empresa OsZagales que gestiona un piso para menores extranjeros no acompañados (conocidos como menas) y otros sucesos ocurridos posteriormente han llevado al Ayuntamiento de Borja a solicitar al Gobierno de Aragón que suspenda este programa en la localidad zaragozana.

El alcalde, Eduardo Arilla, manifestó ayer que, tras consultar con concejales y conocer las intervenciones de la Policía Local de Borja y de la Guardia Civil, propondrá tomar esta medida en el pleno extraordinario que se celebrará este martes con ese único punto a tratar.

Esta decisión la ha tomado después de que varios menas hayan protagonizado incidentes que están alterando la convivencia desde que el pasado 26 de noviembre OsZagales comunicara que había alquilado un piso para acogerlos.

El más grave fue el vivido por una trabajadora social de la propia empresa a la que los jóvenes dejaron encerrada en la vivienda durante varias horas el 24 de diciembre, hecho del que no se conocen más detalles puesto que no llegó a ser denunciado ante la Guardia Civil, según fuentes cercanas al caso y que el alcalde no quiso comentar.

En un comunicado consensuado anoche por todos los grupos del Consistorio borjano (PSOE, IU, CHA, PP y PAR), solicitan la suspensión del programa Menas "por la alarma social creada ante el comportamiento de varios de los usuarios hacia personas de la localidad".

El escrito recoge que "en ningún momento el Ayuntamiento ha solicitado la implantación de este programa en Borja". "La empresa adjudicataria se puso en contacto con la alcaldía cuando ya había tomado la decisión. Le mostramos nuestra preocupación por lo que pretendía abrir y para que todo fuera seguro y se ejerciera el control necesario para que todo funcionara correctamente", manifestó Eduardo Arilla.

Añadió que la empresa les dijo que irían "de la mano" en este asunto. "Pero no ha sido así, ya que no hemos tenido noticias hasta el pasado 5 de enero y porque intervino el Gobierno de Aragón", afirman.

"Solicitamos información externa y se nos comunicó que la actividad cumplía toda la legalidad vigente y podían abrir cuando ellos consideraran oportuno", indicaron. Para los grupos políticos borjanos, es "lamentable" lo ocurrido: "Es un problema estatal que estamos viviendo desde nuestra perspectiva local y que entre todos tenemos que solucionarlo, pero los hechos sucedidos desde su puesta en marcha nos hacen pensar que el proyecto no puede salir adelante y que ha fracasado en nuestro municipio".

Creen que de no haberse producido estos hechos, el programa Mena "pasaría desapercibido" y sería una "iniciativa nacional más encaminada a reinsertar en la sociedad a menores llegados alpaís". Resaltaron que varias familias han sido "ejemplo de acogida e integración social" en sus domicilios en los últimos años de "manera satisfactoria". "Y ahora conviven junto a nosotros. Precisamente esa experiencia positiva y bien planificada nos muestra que somos una ciudad tolerante y preparada y por ello no podemos permitir estos comportamientos que tiran por la borda todo el trabajo realizado anteriormente".