Diez kilómetros en cinco vueltas por todo Maella

Veintitrés atletas, procedentes de Aragón, Cataluña, Burgos, e incluso Marruecos se reunieron ayer para participar en la edición número XXXIII del “Gran Premio San Lorenzo”, competición que organiza la comisión de fiestas en colaboración con la Federación Aragonesa de Atletismo. Los dieciocho corredores de la categoría masculina y las cinco de la categoría femenina acudieron el domingo a esta veterana prueba, que se realiza aprovechando el día grande de las fiestas del municipio de Maella.

El acto, que se organiza como tal desde hace ya treinta y tres años, es heredero de una larga tradición, cuando las carreras pedestres eran una de las actividades de las fiestas populares. Su recorrido alcanza los diez kilómetros, cinco vueltas a un circuito urbano que pasa por las calles más céntricas de la población. Así, los veintitrés atletas tomaron la salida a la una del mediodía desde la plaza de España, con menos calor del que es habitual por estas fechas pero animados por el numeroso público, que se reunió para presenciar el evento deportivo.

Entre las participantes femeninas de esta edición destacó la atleta aragonesa Luisa Larraga, que se proclamó la vencedora de su categoría, batiendo además el récord de la prueba en su modalidad.

Por su parte, en la categoría masculina llegó en primera posición uno de los jóvenes atletas con mayor futuro de Aragón, Jaime Escriche, integrante del equipo nacional de campo a través, quien completó los diez kilómetros en menos de treinta y tres minutos batiendo el récord de la competición. Por otro lado, Miguel Ángel Gimeno, atleta maellano, consiguió un quinto puesto absoluto, llevándose además el trofeo local.

Pero además el Gran Premio San Lorenzo tiene su particular recompensa para el último en cruzar la meta, una ‘Gran Cebolla’ que preside toda la carrera. En esta edición fueron dos los atletas que compartieron este singular galardón. Al acabar, y tras la entrega de trofeos, los dos ganadores masculino y femenino bailaron, como manda la tradición -y bastante bien- la jota de la carrera del pollo, que recuerda lo que antaño recibían como trofeo los ganadores, una flamante ave de corral.

Tanto Luisa Larraga como Jaime Escriche era la primera vez que participaban en la carrera de Maella y ambos destacaron "el calor del público", que durante todo el recorrido animó e incluso refrescó a los participantes. "Esto es muy estimulante", afirmó contenta Larraga, "hay carreras que durante una buena parte del recorrido estás sola. En Maella esto no se produce".Continúa la fiesta

La mañana del martes está dedicada a los juegos infantiles mientras que por la tarde será el fútbol el que tome el protagonismo con una triangular en el campo de fútbol San José entre los equipos de Maella, Chiprana y Mazaleón, un acto muy esperado porque la desaparición del equipo local -que ha vuelto este año a estar activo- había borrado el encuentro deportivo de los programas festivos de años anteriores. La tarde y la noche serán para la música, con sesiones de baile de la orquesta Atalaia y discomóvil para los más fiesteros.