Zaragoza

El río Ebro, protagonista de cine

El cine y la música son dos orillas que el Ebro baña a menudo a lo largo de sus 930 kilómetros.

Fotograma de 'El último aragonés vivo 2'
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El Ebro constituye un escenario único en el que se han rodado un buen número de películas. También ha inspirado un sinfín de canciones. El cine y la música son dos orillas que el Ebro baña a menudo a lo largo de sus 930 kilómetros.


En 1911, Segundo de Chomón filmó una serie de documentales que le permitieron volver a Aragón. En Zaragoza grabó el Pilar, la Seo y los alrededores del Ebro, sus orillas y puentes. Posteriormente, el Ebro sería testigo de duros episodios durante la Guerra Civil, como así lo reflejan los cortos rodados en 1938 ‘La batalla del Ebro’, ‘Bombas sobre el Ebro’ o ‘El paso del Ebro’. Otros obras de corte documental fueron ‘Nacimiento del Ebro’ (1942) y ‘Volando sobre el Ebro’ (1961).


En el Delta del Ebro se rodó la película ‘Sahara’ estrenada en 2005 y protagonizada por Mathew McConaughey y Penélope Cruz. La banda irlandesa U2 escogió también el Delta para rodar el videoclip de la canción ‘Vértigo’.


En 2012, el recinto que de la Expo albergó el rodaje de ‘Anna Bond’ un filme ‘Made in Bollywood’ con varias escenas rodadas junto al Palacio de Congresos y la escultura de Jaume Plensa ‘El alma del Ebro’. El entorno de la Expo, a orillas del Ebro, se ha convertido en un plató muy demandado en el que se ruedan numerosos anuncios publicitarios.


‘El último aragonés vivo 2’, cortometraje de David Terrer protagonizado por Jorge Asín, presentaba un final apocalíptico con el Ebro como protagonista. También lo ha sido en la obra audiovisual de Eugenio Monesma, que documentó el oficio perdido de los barqueros del Ebro. 


En el cortometraje ‘Espera un segundo’, de Germán Roda, se filmaron varias escenas en el Parque de Macanaz con la famosa noria Princess de fondo. El puente de Piedra y el Balcón de San Lázaro también fueron escenario audiovisual para el videoclip de la canción ‘Cómo te quiero’ de Salvatore Stars, dirigido por Emilio Larruga. 


En 2013, Enrique Novials estrenó el cortometraje ‘Los besugos del café inundado’, una comedia que transcurría en el pueblo viejo de Mequinenza desaparecido por la construcción del embalse.

Cuando el río suena

En música, destacan canciones como ‘El paso del Ebro’ (‘Ay Carmela’), popularizado durante la Guerra Civil y compuesta originalmente en 1808 durante la invasión francesa en la Guerra de la Independencia.


El grupo La Bullonera compuso una de las canciones más reivindicativas sobre le Ebro: "Quien quiera llevarse el agua / y el trabajo de Aragón / se las ha de ver primero / con toda su población”. Rosita Ferrer y Manolo Escobar popularizaron con el célebre pasodoble del zaragozano Francisco García del Val ‘Sierra de luna’ la estrofa: "El Ebro guarda silencio / al pasar por el Pilar / la Virgen está dormida / no la quiere despertar".


El Ebro es uno de los temas recurrentes en la jota: “No puedo cruzar el Ebro / me lo impide la arboleda / si no me tiende la mano / una niña arrabalera”; “Las tierras que besa el Ebro / así que entra en Aragón / son como madres fecundas / por el más sublime amor”. También fue muy popularizado en la zarzuela de Echegaray y Caballero ‘Gigantes y cabezudos’: “Por fin te miro / Ebro famoso / hoy es más ancho / y es más hermoso”. 


Artistas como el músico y realizador Arturo Hortas también han cantado al Ebro. Hortas dedicó uno de sus discos al río, titulado ‘Padre Ebro’.


Los festivales son una referencia en sus márgenes y en sus poblaciones: como el Festival de Cine de Fuentes, que se celebra en la localidad de Fuentes de Ebro; o los Festivales del Ebro, que aglutinan gran parte de la programación cultural de la capital aragonesa durante los meses de verano.


Disfrutar de la música en directo sobre el río o bajo el puente de Piedra es otro de los 

alicientes del Ebro. En 1986, durante las Fiestas del Pilar, dos barcas traídas desde San Sebastián, la Aitona Julián y la Nuestra Señora del Carmen, daban paseos amenizados con música de violín y acordeón entre el Club Náutico y Helios. Más reciente es la iniciativa de la Asociación Iberflumen, que ha organizado en varias ocasiones conciertos bajo uno de los arcos del puente de Piedra. Sin duda, un lugar mágico para escuchar la música del Ebro.