Huesca tendrá más calles peatonales y zona de bajas emisiones sin control de etiquetas
El Ayuntamiento presenta las líneas generales y los objetivos del nuevo plan de movilidad, que incrementará la superficie urbana sin coches y promoverá el uso del transporte público y la bicicleta.
Huesca ya está preparada para ser más peatonal. El Ayuntamiento ha presentado este jueves las líneas generales del nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), que dará continuidad a la peatonalización iniciada en 2011 y que pretende transformar la ciudad en un referente. El proyecto conlleva una Zona de Bajas Emisiones (ZBE), que la normativa obliga a implantar en poblaciones con más de 50.000 habitantes.
Este plan, que se encuentra en su fase de propuestas provisionales, se ha desarrollado tras un "exhaustivo análisis de la movilidad en la ciudad y la colaboración con diversos sectores de la comunidad". Las propuestas incluidas en el documento se someterán a un proceso de participación ciudadana, que ha comenzado en la tarde de este jueves con su presentación en la Ponencia de Movilidad para su estudio y debate.
Las ZBE son áreas delimitadas en las cuales se restringe el acceso y el aparcamiento a determinados vehículos en función de sus emisiones (que identifican unas etiquetas) , con el objetivo de mejorar la calidad del aire. En Huesca, se implantará un modelo de restricciones adaptado a sus características, según ha explicado el concejal de Urbanismo, Iván Rodríguez.
Los niveles de contaminación de aire y ruido registrados en la capital oscense permiten homologar la ZBE con el ámbito peatonal, lo que conllevará que no haya control de etiquetas. Al mismo tiempo, se incentivará el uso de transportes sostenibles y se reducirá el del coche. Para conseguirlo, se crearán más calles peatonales y se mejorará el transporte público y la red viaria ciclista.
El ámbito peatonal se incrementará en aproximadamente 24 hectáreas (un 68%), "por fases y a largo plazo", ha señalado el concejal. Las principales actuaciones incluirán la urbanización de calles "clave" como Zaragoza, Alcoraz, Coso Alto, plaza Navarra, Miguel Servet, Desengaño y Lanuza, mejorando la seguridad y accesibilidad para los peatones. Esta reurbanización transformaría morfológicamente las vías para adaptarse al peatón frente al vehículo motorizado.
La zona peatonal se completará por el norte con la trama urbana que queda limitada por las avenidas Monreal y San Juan Bosco y por la Ronda Montearagón. Por el sur, la acotarán la calles Obispo Pintado y Ramón J. Sender.
La consultora Doymo (que ha realizado el estudio y se encarga de la propuesta) ha planteado tres escenarios, con objetivos temporales de incremento de la peatonalización o de las calles con prioridad peatonal, con paso de vehículos a velocidad máxima de 20 kilómetros/hora. Iván Rodríguez ha explicado que el ritmo de aplicación de estas medidas será definido en la Ponencia de Movilidad y que las ampliaciones se irán acompasando con las obras de reurbanización.
La primera intervención se llevará a cabo en el Coso Alto, desde la plaza Inmaculada hasta la calle Amistad. Las obras, con un coste de 1,9 millones de euros comenzarán después de las fiestas de San Lorenzo 2024. La siguiente será la calle Zaragoza, desde la plaza Navarra hasta el cruce con Cabestany, cuyo proyecto está en exposición pública.
Entorno de los colegios
Además, se plantea mejorar la oferta peatonal del entorno de los colegios así como los aparcamientos. Para ello, se propondrá crear líneas de autobús escolar "exclusivas" para las horas de entrada y salida de las clases, mejorando la seguridad y fomentando el uso del transporte público que conecte a la población escolar, que mayoritariamente reside en las nuevas zonas de viviendas del sureste de Huesca, con los distintos centros educativos.
Continuará la expansión de la red ciclable, que en los últimos 12 años ha pasado de 10,5 a 21,6 km. Se plantea alcanzar los 25 km para acabar de cerrarla. Además, se mejorará la calidad de la oferta ciclista (bajando el carril a la calzada donde sea posible) y se ampliarán los aparcamientos para bicicletas (más de 100 puntos y 500 plazas).
Iván Rodríguez y el director de proyectos de Doymo, Manuel Pineda, han presentado las conclusiones de la diagnosis y las propuestas. El análisis ha identificado que las tres cuartas partes de los desplazamientos internos de Huesca se realizan a pie, los que "evidencia la sostenibilidad del sistema y refleja el compromiso de la ciudad con la reducción de la huella de carbono".
Autobús urbano y aparcamientos
El PMUS contempla la adaptación del transporte público a la demanda y, además de la creación de una nueva línea de autobús escolar se propondrá la modificación de los recorridos de los autobuses interurbanos, para cubrir mejor las zonas exteriores del municipio, como el Parque Tecnológico de Walqa.
El diseño de la nueva Huesca se completa con la instalación de aparcamientos disuasorios y públicos, como el que se prevé acondicionar en la zona General Alsina (cerca del depósito de agua), mejorando la accesibilidad para los vecinos. Se estudiará la posibilidad de crear plazas exclusivas para residentes en el centro histórico.
