Aluvión de donativos para repatriar a Chile al piragüista fallecido en Torla: "La respuesta ha sido increíble"

"Ha sido increíble la respuesta de la gente y el apoyo económico que hemos recibido". Son las palabras de agradecimiento de la empresa de multiaventura Alcorce Rafting & Kayak, de Murillo de Gállego, después de haber conseguido recaudar dinero suficiente para poder repatriar a Chile el cadáver de Marcelo Omar Figueroa, conocido como 'Chelo' o 'Chelito', el joven piragüista fallecido la semana pasada cuando descendía con un kayak el río Ara, en Torla. 

La víctima, de 25 años, llevaba tres temporadas -desde primavera a otoño- trabajando como guía de aguas bravas en esta empresa de Murillo. Allí lo siguen añorando porque era "una gran persona, joven y muy cariñoso, sonriente y alegre", destacan.

Este miércoles, sus compañeros y amigos de Murillo de Gállego le rendirán un último homenaje en la intimidad junto a familiares que han viajado desde Chile para realizar los trámites de la repatriación del cuerpo. 

Alcorce lanzó el fin de semana una campaña a través de las redes sociales para pedir donativos con los que asumir los gastos de la funeraria y el viaje del cadáver. Y es que la víctima no tenía seguro de defunción que pudiera cubrir estos costes. Gracias a las aportaciones recibidas en los últimos días, han conseguido recaudar algo más de los 7.000 euros que necesitaban para la repatriación, por lo que han cerrado la recogida de aportaciones.

El fallecido, de 25 años, acudió el jueves de la semana pasada a Torla para practicar con el kayak. Estaba descendiendo por el río junto a otros dos compañeros y tuvo un accidente, sobre las 15.00. Cuando lo encontraron estaba inconsciente y, aunque le hicieron maniobras de reanimación, no pudieron salvar su vida. Debido a condiciones climatológicas adversas, no se pudo activar el helicóptero de la Guardia Civil y los dos efectivos del Greim de Boltaña tuvieron que trasladarse al lugar en vehículo oficial y posteriormente a pie.

Tras localizar a los piragüistas, los agentes pudieron comprobar que el accidentado presentaba signos no compatibles con la vida, y evacuaron el cuerpo en camilla a hombros. Para las labores de rescate, solicitaron apoyo de otros dos especialistas más por la complicada orografía y a la meteorología adversa.

Entre los cuatro lograron llevarlo a una pradera donde lo esperaba una ambulancia, para llevarlo al centro de salud de Broto y, posteriormente, ser transferido a los servicios funerarios para trasladarlo al Instituto de Medicina Legal de Huesca.