Huesca reduce una hora la iluminación de las calles y dos la calefacción para ahorrar
Son las medidas más destacadas que ha adoptado el Ayuntamiento para reducir el consumo energético ante el incremento del precio de la electricidad y del gas.
El Ayuntamiento de Huesca, ante la situación generada como consecuencia del incremento de los precios de la energía, ha establecido diferentes medidas de ahorro energético con el objetivo de disminuir el gasto. Entre ellas, destaca la que afecta al horario de iluminación de las calles, que se reduce en media hora al amanecer y otra media al atardecer.
También se acorta el horario de la calefacción dos horas al día en todos los centros municipales hasta el 31 de marzo, fecha en la que se suprimirá definitivamente el servicio de calefacción. Por circunstancias meteorológicas excepcionales podrá reactivarse el servicio puntualmente. Además, se prohíbe de forma expresa la utilización de equipos de climatización particulares que impliquen consumo de energía.
Otras de las medidas que se marcan desde el Ayuntamiento son reducir o suprimir la iluminación exterior de todos los edificios municipales y de la zona del parquin de la Casa Consistorial así como mantener apagado el alumbrado en todas aquellas dependencias en las cuales no haya actividad o personas. Además, se mantendrán desconectados los equipos de informática del puesto de trabajo fuera del horario laboral y se limitará la utilización de vehículos municipales a aquellos servicios que sean imprescindibles.
La factura eléctrica municipal ascendió a 2,3 millones de euros el año pasado. Para 2022 ya se incrementó esta partida con 150.000 euros. El gasto incluye el consumo de kilovatios del alumbrado de las calles, los edificios municipales o los colegios públicos de Primaria, de cuyo mantenimiento se ocupa el Ayuntamiento y con calefacciones mayoritariamente de gas.
En 2021 ya se apreció un importante incremento del 7% en los recibos por el aumento del precio de la luz. Se prevé que ahora se dispare otro 15%. La idea general es reducir el consumo tanto de luz como de calefacción en todas las instalaciones.
Estas medidas se suman a la renovación de las luminarias de la ciudad por luces de tecnología LED, de menor consumo. Desde el inicio de 2020, se han sustituido más de 2.000 mil puntos de luz en la ciudad. Las últimas bombillas se instalaron en el parque Miguel Servet a fineles del año pasado y las siguientes se colocarán en el avenida Menéndez Pidal. Además, están en zonas como la avenida de los Danzantes, el Paseo Lucas Mallada, el Polígono 41 o la calle Alcañiz.
En 2002
Hace 20 años, el Ayuntamiento activó una plan de ahorro que, entre otros gastos, afectó al del alumbrado público, que entonces suponía 700.000 euros anuales. Se redujeron las horas de iluminación de los monumentos y se instalaron reguladores para disminuir la intensidad de los puntos de luz allí donde era excesiva. A pesar de todo, la factura de la electricidad no logró reducirse.
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