Cáritas Huesca cierra su sede central tras el derrumbe del techo del Obispado
Las oficinas de la organización permanecerán cerradas hasta que los técnicos municipales garanticen la seguridad del edificio y permitan retomar la actividad con total normalidad.
Cáritas Diocesana de Huesca ha anunciado este lunes que, debido a la situación de derrumbe parcial del techo del edificio del obispado de Huesca, sus oficinas centrales (ubicadas en Costanilla de Ricafort 5), permanecerán cerradas hasta que los técnicos municipales garanticen la seguridad del inmueble y permitan retomar la actividad con total normalidad. El desplome de la planta situada bajo cubierta se ha produjo este viernes debido a la fuerte tormenta registrada esa tarde en la capital oscense.
El resto de los centros y proyectos de Cáritas Huesca continúan en pleno funcionamiento, según han informado desde la entidad. Además, se han habilitado las medidas necesarias para permitir seguir desarrollando el trabajo de los servicios generales de la organización de forma telemática o derivadas a otras instalaciones.
Desde Cáritas Huesca confían en la pronta solución de esta situación para poder retomar la actividad de las oficinas diocesanas de Cáritas Huesca y del Obispado, siempre desde la seguridad.
El arquitecto de la Diócesis de Huesca, Joaquín Naval, ha indicado este lunes que en primer lugar se va a proceder a retirar los escombros, para facilitar el acceso al interior del edificio. "La intención es disponer de la maquinaria a partir del martes para sacar los escombros, que es la primera labor que hay que realizar, para tener accesibilidad al interior", ha afirmado. Según ha dicho, "está claro que hay unos efectos atmosféricos de alcance con aparato eléctrico, que ha ocasionado el derrumbe y el colapso de la estructura".
El obispado está situado en la plaza de la Catedral, frente a la seo y la Casa consistorial. Afortunadamente, en el momento del hundimiento no había nadie en el interior del edificio y que, además, el obispo no reside allí. Se derrumbaron unos 150 metros cuadrados de tejado y los escombros cayeron sobre un piso donde se ubica la capilla.
Los responsables de la diócesis explicarán este martes el alcance de los daños producidos así como el posible traslado de algunos servicios del obispado a otras ubicaciones.
