Huesca

cocaína y éxtasis

El joven que ofreció droga a dos guardias civiles en Fraga será expulsado del país

La defensa y la Fiscalía han llegado a un acuerdo para rebajar la petición inicial de seis años de prisión.

El juicio previsto en la Audiencia Provincial de Huesca no ha llegado a celebrarse al alcanzar un acuerdo.
Javier Blasco/Heraldo

El joven de 25 años de nacionalidad marroquí que debía ser juzgado el martes y miércoles de esta semana en la Audiencia de Huesca por haber intentado vender dos papelinas de cocaína y éxtasis a dos agentes de la Guardia Civil de paisano, con un peso total de 1,6 gramos entre ambas, será expulsado finalmente del país por un periodo de cinco años. Los hechos ocurrieron en las inmediaciones del parquin de la discoteca Florida de Fraga en diciembre del 2018 y resultó que las dos personas a las que trató de pasar la droga eran dos guardias que se encontraban prestando un servicio de seguridad ciudadana.

El joven, residente en Olesa de Montserrat (Barcelona), debía haberse presentado al juicio el martes, pero ese día no acudió. Sí ha estado en la segunda sesión, en la que  ha aceptado el acuerdo alcanzado entre la Fiscalía y su abogado defensor para fijar la condena en dos años de prisión, que se sustituye por la expulsión del país. No podrá volver a España durante cinco años. 

Esto supone una rebaja sustancial respecto a lo que pidió el Ministerio Público en su escrito de calificación provisional. La acusación solicitaba la pena más dura contemplada por el Código Penal para el delito contra la salud pública en la modalidad de sustancias que causan graves daños a la salud, castigado con penas de prisión de 3 a 6 años.

En poder del joven se encontró cocaína con un peso neto de 0,77 gramos y una riqueza del 31,59% que en el mercado ilícito tendría un valor de 45,70 euros. Llevaba además una bolsita con otro polvo blanco que resultó ser MDMA (éxtasis), con un peso neto de 0,82 gramos, una riqueza del 73,6% y un valor de 21,89 euros. Además, el acusado también les intentó vender una bolsa con seis setas alucinógenas con un peso neto de 1,46 gramos.

Tras ofrecerles las sustancias, le informaron de su condición de guardias civiles, momento en el que el joven intentó huir lanzando al suelo las dos papelinas, pero fue detenido. En el cacheo posterior le encontraron 65,44 euros en metálico que, según el fiscal, provenían de ventas previas.