El jefe de Ginecología de Jaca asegura que hay medios suficientes para atender los partos
El Salud está a punto de cerrar la contratación de un médico que haría innecesario el traslado de especialistas desde el hospital San Jorge de Huesca.
Desde 1989 hasta ahora, el hospital de Jaca ha atendido 4.285 partos. Con este dato, el jefe del servicio de Obstetricia y Ginecología defiende la calidad asistencial prestada por el centro y considera "injusta y errónea" la creencia de la escasez de medios. Juan José Isern asegura que el porcentaje de "desenlaces indeseados" es parecido al de hospitales de similares características. Aquí trabajan tres ginecólogos, dos de los cuales no hacen guardias por edad.
En una carta firmada por él y difundida por el comité de empresa sale al paso de las opiniones que cuestionan la continuidad de los partos en Jaca y cree que la solución no es trasladar a los ginecólogos desde Huesca para cubrir las guardias.
Uno de los mayores riesgos del alumbramiento es una hemorragia masiva. Esta situación, explica el especialista, se ha dado en tres ocasiones. Se derivaron a la uci del hospital San Jorge y las tres mujeres se recuperaron bien. La falta de una unidad de cuidados intensivos y de un banco de sangre son dos de los argumentos barajados contra la continuidad de las urgencias ginecológicas.
Juan José Isern explica que existe un stock permanente de sangre compatible con todos los grupos que permite iniciar la transfusión de modo inmediato y en caso de requerir más cantidad, hay tiempo de conseguirla o trasladar a la paciente en la uci a San Jorge. "Si bien la hemorragia masiva es muy infrecuente, existen muchos más casos que se beneficiarían de una asistencia precoz, antes de llegar a Huesca: patología placentaria sangrante, sufrimientos fetales, partos precipitados... siempre mejor en nuestro hospital que en el atasco de Monrepós", argumenta.
"No disponemos de uci ni de banco de sangre", dice, porque el de Jaca es un hospital comarcal, como los de Alcañiz o Calatayud y, salvo los de último nivel, "en todos existen determinadas carencias". El centro, que atiende a las comarcas de la Jacetania y el Alto Gállego y a parte del Sobrarbe, se sometió a una remodelación para mejorar sus instalaciones que concluyó en 2012, con importantes inversiones. Desde el 1 de enero de 2015 está integrado en el Salud.
Reunión con García Encabo
El Salud parece haber encontrado ya una solución provisional al problema que se suscitó por la falta de especialistas para cubrir las guardias ginecológicas y obligó durante casi dos semanas a derivar los partos a San Jorge. Ha contactado con dos posibles candidatos y espera cerrar en unos días la contratación. Son de fuera de Aragón y solo falta comprobar que reúnen todos los requisitos de la especialidad. Fuentes de la consejería confirmaron que, si no surgen obstáculos de última hora, ya no sería necesario el traslado de ginecólogos del hospital San Jorge.
Los facultativos de Huesca mantuvieron una reunión con el director general de Asistencia Sanitaria, Manuel García Encabo, quien les informó de que se estaban cerrando nuevos contratos para ir a Jaca. Esto solventaría el problema a la espera de que el grupo de trabajo anunciado por el consejero, Sebastián Celaya, determine si este centro tiene capacidad para seguir asistiendo los partos. El responsable sanitario les transmitió en ese encuentro que se recurrirá a ellos solo como remedio temporal y para complementar el servicio en el centro jacetano.De un centro a otro
El jefe de Obstetricia y Ginecología de Jaca también considera que la solución definitiva pasa por la contratación de los especialistas necesarios para cubrir las guardias. Enviar médicos de un centro a otro solo es justificable, a su juicio, si no conlleva una merma sustancial en la calidad de la asistencia.
"No pretendemos dejar descubierto al servicio de ginecología del hospital San Jorge. Esto supondría un sinsentido que repercutiría gravemente incluso en nosotros mismos: allí intervienen y resuelven no solo los suyos sino nuestros casos complicados. No deseamos consentirlo, por lo menos de modo permanente", señala Juan José Isern. Y es que el desplazamiento a Jaca dejaría mermada la plantilla en la capital oscense. Implicaría reducir al mínimo las consultas y las intervenciones quirúrgicas, sin descartarse incluso derivar los casos más graves a hospitales de la capital aragonesa.