Lo que tenía que ser un día de fiesta y alegría en Sabiñánigo con el inicio de sus fiestas patronales, se tornó en una jornada trágica ante el fatídico atropello que el miércoles causó la muerte al joven de 20 años Daniel Jiménez. La capital serrablesa vivió ayer uno de sus días más tristes, con el luto oficial decretado por el Ayuntamiento y la suspensión de todos los actos festivos organizados tanto por el consistorio como por las peñas. Estas expresaron sus condolencias a la familia del joven peñista y aunque por la noche reanudaron los actos, «no nos quedan ganas de celebrar», señalaron en un comunicado. 

Las banderas ondearon todo el día a media asta. Este suceso inesperado vació  las calles de la capital serrablesa, donde no se hablaba de otra cosa y se respiraba el dolor por la pérdida de este joven. Igualmente las redes sociales fueron la plataforma a través de la cual amigos, conocidos y vecinos de la localidad y alrededores mostraron sus condolencias a la familia en estos días tan difíciles. También aparecieron fotos de Daniel publicadas por sus amigos, con las que quisieron homenajearle.

El cuerpo estaba ayer en el tanatorio. No se celebrará funeral por expreso deseo de la familia y hoy el cadáver será trasladado a Huesca para su incineración.

La Policía Local de Sabiñánigo ha sido la encargada de realizar las diligencias del accidente ocurrido el miércoles en la calle Secorum. Al conductor del coche, E. G. D., un joven natural de Zaragoza pero instalado en Jaca desde hace años, se le realizaron las pruebas de alcohol y drogas, tal y como establece el protocolo en estos casos, cuyo resultado no ha trascendido. Fuentes próximas al joven señalaron que este se encontraba en su domicilio jaqués en la tarde de ayer, visiblemente conmocionado por el suceso.Terrible coincidencia

Y es que se da la circunstancia de que el chico fallecido y el que llevaba el coche eran muy amigos, unidos por su pasión por el fútbol. Ambos han sido guardametas e incluso han coincidido varias temporadas en el mismo equipo, los juveniles de la AD Sabiñánigo, donde Daniel Jiménez solía actuar como portero titular y E. G. D. era el suplente.

Tras concluir la etapa juvenil, Jiménez formó parte la temporada pasada de la terna de porteros del Sabiñánigo de Tercera División. Su técnico, Dani Aso, recordaba ayer que «debutó en un partido contra el Zaragoza B».

En la presente campaña Daniel Jiménez había decidido aparcar el fútbol tras el reciente fallecimiento de su padre a causa de una grave enfermedad. Por eso, como explicaba ayer el presidente del Sabiñánigo, José Luis Bandrés, «se había sacado el título de monitor  de tiempo libre y de socorrista para empezar a trabajar».

De hecho, el siniestro ocurrió cuando Daniel había terminado su jornada laboral como socorrista en la piscina del hotel del campin Aurín y se dispuso a cruzar la carretera situada en dicho polígono llevando su bicicleta en las manos. Al parecer, se trata de una zona con poca visibilidad por la presencia de unos setos, unido al hecho de que la luz, a las nueve de la noche, ya empezaba a escasear.

El presidente del Sabiñánigo ha querido insistir en ofrecer «todo el apoyo posible a la familia, que vive un auténtico drama». De hecho, el próximo miércoles, en el partido amistoso que hay previsto contra la Sociedad Deportiva Huesca, se pretende realizar «algún tipo de homenaje». Bandrés confirmó la conmoción que se vive en la capital serrablesa «por la muerte de un chico muy querido», en unas fiestas que ya están marcadas por la tragedia.