Aragón

Acampada por Palestina en la Universidad de Zaragoza: "Seguimos esperando una respuesta del rectorado"

Casi medio centenar de estudiantes siguen pernoctando en una treintena de tiendas de campaña en los alrededores del estanque del campus.

Un grupo de estudiantes prepara una pancarta junto al campamento instalado en la zona del estanque del campus de Zaragoza
Guillermo Mestre

La acampada propalestina en la Universidad de Zaragoza continúa la presión para la suspensión de relaciones con Israel y los participantes se preparan para mantener la protesta en el campus el tiempo que haga falta, hasta el punto de que ya tienen programadas actividades para el fin de semana que viene. Incluso han revisado si las tiendas son impermeables para hacer frente a las lluvias que se avecinan. Seis banderas palestinas ondean alrededor de la treintena de tiendas en las que están durmiendo cerca de medio centenar de estudiantes. Otra preside la entrada al edificio Interfacultades II, en el que se ha colgado una pancarta con el lema: ‘Viva Palestina libre. Estudiantes contra el genocidio’.

Estamos dispuestos a seguir adelante hasta que nos den una respuesta y cumplan con nuestras exigencias. Seguimos esperando una respuesta del rectorado, que no nos ha contestado nada oficialmente a la ruptura de cualquier tipo relación con entidades académicas y empresas israelíes. Sí estamos manteniendo conversaciones con el vicerrectorado por cuestiones más de logística”, explica Jorge García, uno de los portavoces de la movilización impulsada bajo el paraguas de la Asamblea Popular del campus aragonés.

‘La Universidad es el pueblo, y el pueblo está con Palestina’ es el lema escrito en la lona roja de una de las tiendas. García se muestra satisfecho con la afluencia de personas que se han acercado durante el fin de semana a mostrarles su apoyo y a compartir con ellos un rato de charla. “Ya somos algo más de gente que el primer día y estamos convencidos de que los que estamos ahora aquí continuaremos porque esto no se desinfla así como así”, afirma García.

Fotos del tercer día de la acampada propalestina en el campus de Zaragoza

Ya han empezado a organizar el día a día en este asentamiento por la paz. Para sufragar los gastos de la protesta han abierto una “caja de resistencia”. Los ingresos se destinarán a la compra de alimentos (aunque están recibiendo algunas donaciones de productos que agradecen) y de materiales destinados a confeccionar pancartas y hacer talleres porque su objetivo es dinamizar la movilización. Incluso tienen unos horarios establecidos para que a partir de medianoche “no haya ruidos y la gente pueda descansar, hay personas que se levantan a las seis y media para ir a trabajar”. 

Ante el aumento de participantes, han solicitado a la Universidad de Zaragoza que les deja utilizar una segunda sala de estudios. En estos próximos días también quieren entrar en contacto con las protestas que se están desarrollando en otros campus españoles y plantear alguna acción conjunta.