Contar con las mismas oportunidades que los demás, sentirse incluidos y jugar y aprender con todos y tener acceso a la salud y a una educación de calidad. Son algunas de las reivindicaciones a las que este jueves han puesto voz cinco niños y jóvenes con discapacidad que han leído en la sede de Cermi Aragón (Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad) en Zaragoza el manifiesto del día nacional de la Convención internacional sobre sus derechos que se celebra este viernes 3 de mayo.

Jimena, del centro de educación especial San Germán de Aspace que tiene una parálisis cerebral; Carla Martínez de Plena Inclusión, Ramiro Espinosa, Jhoceline Pazmiño que ha leído en braille su parte de la declaración y Carlota, de la Agrupación de Personas Sordas de Zaragoza y Aragón (ASZA) que lleva un implante coclear, han sido los protagonistas de la jornada. La consejera de Bienestar Social y Familia, Carmen Susín, se ha encargado de leer un fragmento de la declaración adaptada.

“También queremos que los niños y niñas con discapacidad podamos expresar nuestras ideas y opiniones libremente. Es importante escuchar lo que tenemos que decir”. Es una de las demandas que expresan los menores.

Los niños con discapacidad reclaman sus derechos

Una vez concluido el acto oficial, algunos de los escolares participantes apuntan sus particulares reclamaciones. “Sobre todo necesitamos más auxiliares de educación especial que nos sirvan de apoyo. En mi colegio antes había hasta cinco, este curso hay solo tres y hoy (por ayer) dos”, pide Martínez, de 11 años, que estudia 6º de Primaria en un colegio público zaragozano que ha sufrido la falta de estos especialistas y su llegada a las aulas con el curso ya avanzado. “A lo mejor yo no los necesito tanto, pero sí otros compañeros”, añade.

Espinosa, que cursa 5º de Primaria en el mismo centro educativo, solicita sobre todo “edificios y colegios donde sea fácil entrar con sillas de ruedas y en los que no haya barreras de ningún tipo”. Para la tía de Pazmiño, todavía queda “mucho por conseguir” para poder hablar de una “verdadera inclusión”. “La ONCE la ha arropado en todo momento, tiene mucho apoyo por parte de la organización para estudiar y en su día a día, pero falta más concienciación a nivel de la sociedad, en la calle”, señala.

El presidente de Cermi Aragón, Jesús Carlos Laiglesia, explica que este año se ha querido poner el foco en los más jóvenes “porque ellos son nuestros mejores maestros guiándonos por el camino hacia un mundo donde la diversidad se celebre y todo el mundo pueda alcanzar su máximo potencial”. Laiglesia ha concluido con un deseo aplaudido por todos: "Que podáis soñar vuestro futuro y hacerlo realidad".