Aragón apuesta por la economía circular: 5.000 toneladas de aceite industrial usado recicladas en 2021
Un total de 2.369 establecimientos de sectores tan diversos como la automoción, la industria, el transporte, el comercio o la construcción, se han reciclado la mayor parte.
Un total de 5.811 toneladas brutas de aceites usados, incluyendo impropios como agua y otros sedimentos, repartidas entre 2.369 establecimientos de sectores tan diversos como la automoción, la industria, el transporte, el comercio o la construcción, se recogieron en 2021 en Aragón a través del Sistema Integrado de Gestión de Aceites Usados (SIGAUS). El 45% de estos establecimientos corresponden a talleres mecánicos.
Esta generación fue extremadamente dispersa en el territorio, ya que más de la mitad de estos puntos productores de aceite usado (un 55%) generaron menos de una tonelada de residuo, acumulando entre ellos apenas un 12% del total del aceite usado generado. En total, para recoger todo el aceite usado fue necesario efectuar 5.679 operaciones de recogida entre 288 municipios aragoneses.
Gestión en las zonas más vulnerables
Una vez terminada su vida útil, el aceite industrial se convierte en un residuo muy contaminante debido a la presencia de metales pesados y otras sustancias tóxicas, que puede afectar negativamente a nuestro entorno y a la salud de las personas si no se trata adecuadamente.
Por ello, es fundamental contar con un sistema logístico y financiero que permita recoger este residuo allí donde se produce, aunque sea en zonas alejadas o de difícil acceso. Así, gracias al sistema logístico puesto en marcha por SIGAUS, se recuperaron el pasado año 2.410 toneladas de aceite usado en 268 municipios rurales aragoneses, otras 380 toneladas en municipios de montaña y 448 toneladas en municipios de menos de 1.000 habitantes.
El coste logístico de recuperar el residuo en este tipo de zonas es muy elevado, ya que implica largos desplazamientos poco rentables, más aún en estos momentos en el que la crisis energética ha elevado tanto el precio de los combustibles, por lo que la financiación de la recogida del residuo resulta fundamental como servicio ambiental, pero también económico y social en estas zonas poco pobladas y alejadas de los grandes núcleos urbanos que, sin embargo, suelen contar con grandes valores naturales.
"En 2021 hemos sido testigos del aumento de los precios de la energía y de los combustibles, un incremento que en los últimos meses ha superado el 60%. Dado que cada año es necesario recorrer miles de kilómetros para recuperar el aceite usado que se genera en Aragón, resulta evidente cómo la crisis en los precios de la energía tiene un fuerte impacto en los costes de gestión del residuo delaceite industrial", ha señalado el director general de SIGAUS, Eduardo de Lecea.
"Para que estos vaivenes del mercado no impidan que la gestión del aceite usado se lleve a cabo, la financiación que aportamospara cubrir el déficit de estas actividades resulta fundamental, para que ésta sea viable ambiental y económicamente", ha agregado.
Gran importancia ha tenido, asimismo, la recogida del residuo junto a espacios protegidos, donde evitar la contaminación del aceite usado resulta imprescindible para evitar un importante impacto ambiental.
En 2021 se atendieron 13 establecimientos generadores de este residuo situados en el entorno de 6 espacios protegidos aragoneses, entre los que se encuentran parques naturales, reservas de labiosfera o reservas naturales. En estos enclaves se recogieron en total 12 toneladas de aceite usado.
Como ejemplo, se recuperaron 4.549 kilos en instalaciones próximas a la Laguna de Gallocanta o los Tremedales de Orihuela.
También ha sido destacable la recogida del aceite usado en el entorno de recursos hídricos, como ríos, embalses o lagos, donde se recogieron 187 toneladas de residuo en 153 puntos productores. Como ejemplo, se recuperaron 37 toneladas en instalaciones próximas a embalses o lagos, como el de Mequinenza o el de Yesa.
Tratamientos
Una vez recogido, el aceite usado fue trasladado a centros de transferencia para su análisis y eliminación de posibles impropios, proceso que una vez completado resultó en una cantidad neta de aceites usados de 5.127 toneladas, volumen finalmente tratado para obtener nuevos productos, siguiendo los principios de la economía circular.
De esa cantidad, una tercera parte del residuo, 1.719 toneladas, fueron destinadas a regeneración. Se trata de un tratamiento que permite obtener nuevas bases lubricantes del aceite usado y que es elque prioriza la actual normativa.
Gracias al residuo regenerado en Aragón durante el pasado año fueposible producir más de 1.000 toneladas de nuevos lubricantes y ahorrar más 505.000 barriles de petróleo, en comparación a si esos lubricantes se hubiesen producido a partir del refino del crudo.
El aceite usado regenerado también permitió evitar la emisión de cerca de más de 1.000 toneladas de CO 2 a la atmósfera, y el gasto de 22 GWh.
El resto del aceite usado no regenerado fue valorizado energéticamente mediante otro tratamiento que permite transformar el residuo en un combustible de uso industrial que suele usarse en hornos de cementeras, papeleras o en centrales térmicas de generación eléctrica, minimizando así el uso del fuel óleo o de otros combustibles provenientes del petróleo.
Este tratamiento también reportó diversos beneficios a nuestro entorno, ya que gracias al aceite usado valorizado energéticamente enAragón (3.408 toneladas) fue posible evitar la emisión de 1.868 toneladas de CO 2 a la atmósfera y ahorrar 3 GWh de energía.
