Lambán acusa a la Generalitat de "atacar" el proyecto olímpico al ignorar de nuevo a Aragón
El presidente del Gobierno de Aragón critica que Aragonès impulse la candidatura en solitario e insista en denominarla Pirineus-Barcelona 2030.
El presidente aragonés, Javier Lambán, acusó este miércoles al Gobierno catalán de "atacar" la candidatura olímpica para los Juegos de Invierno de 2030 al ignorar de nuevo a Aragón e incluso al Comité Olímpico Español (COE). Lambán censuró el acuerdo alcanzado el pasado martes por la Generalitat para "impulsar" el proyecto, al que sigue denominando Pirineus-Barcelona 2030 pese a compartirlo con Aragón y haber dejado muy claro el presidente del COE, Alejandro Blanco, que se trata de una propuesta de las dos autonomías. "No tengo ninguna duda de que Aragón o Zaragoza tienen que estar en el nombre de la candidatura", dijo Blanco en una entrevista a este diario a mediados de julio.
El malestar era mayúsculo en el titular de la DGA con su homólogo catalán, Pere Aragonès, que compareció ante los periodistas tras el Consejo de Gobierno para dar cuenta del acuerdo como si fuera una propuesta exclusivamente catalán. "No tienen que ser 15 días e irse, sino que necesitamos un plan de desarrollo. Vamos a trabajar conjuntamente con los territorios y comarcas de Cataluña para diseñar la estrategia", dijo.
Ni en la nota de prensa ni en sus declaraciones hubo referencias al hecho de que la carta de intenciones enviada por Alejandro Blanco a mediados de julio al Comité Olímpico Internacional se refiere expresamente a una candidatura de Cataluña y Aragón. "Este acuerdo supone un ataque en toda regla a la candidatura española porque ignora al COE, único promotor posible de la candidatura, y a Aragón, sin cuya participación la candidatura es inviable tal y como ha puesto de manifiesto Alejandro Blanco repetidamente", replicó Lambán.
La Generalitat se arroga la gestión íntegra al anunciar una comisión interdepartamental, adscrita a la Consejería de Presidencia, "para elaborar el proyecto de la candidatura y establecer las directrices para organizar los mecanismos de participación ciudadana".
Este anuncio va en contra de la propia programación del COE, que prevé celebrar las primeras reuniones para armar la propuesta en septiembre y crear varios equipos técnicos de trabajo para, después de los Juegos de Invierno de Pekín, presentarla de forma oficial ante las autoridades olímpicas. A este respecto, Blanco se mostró contundente sobre la implicación de todas las partes: "Tiene que ser un acuerdo de todo el mundo. No tengo ninguna duda, porque Aragón entra en la candidatura. Tenemos que plantear todo encima de la mesa, no adelantar ni especular, y todas las partes implicadas, los gobiernos de España, Cataluña y Aragón, y el Comité Olímpico Español, tenemos que estar de acuerdo".
No quedó ahí el agravio, dado que Aragonès insistió en denominar el proyecto como Pirineus-Barcelona 2030, que a juicio de Lambán "hace imposible el necesario consenso que está impulsando el Gobierno de España y el COE y sin el que no habría candidatura".
Advertencia de desestimación
De la misma forma, el presidente catalán vuelve a condicionar el proyecto olímpico a las consultas que sobre la cuestión se hagan en el territorio, condición puesta por sus socios para garantizar la gobernabilidad. Para colmo, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pretende que se extiendan a la capital, lo que también fue blanco de las críticas de Javier Lambán. "Esto en sí mismo es motivo de desestimación de la candidatura por parte del COI", advirtió.
Por todo ello, consideró que desde la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona se trabaja para "echar por tierra la candidatura antes de empezar a andar". Y concluyó que con su actitud, "el independentismo demuestra una vez más que no está dispuesto a compartir ningún proyecto e idea con el resto de España".
