La reapertura del tren Pau-Canfranc, en la prensa especializada de logística

La prensa especializada de transporte y logística como ‘TransportiEuropa’ dedicó esta semana un artículo a la reapertura del tren internacional Pau-Canfranc bajo el título «Francia y España quieren reabrir el túnel ferroviario de los Pirineos».

«Hay un nuevo acuerdo entre el Ministerio de Transporte español (Mitma) y la región francesa de Nouvelle-Aquitaine. El contrato incluye estudios sobre el impacto ambiental, el estado actual de la obra civil del túnel y la infraestructura ferroviaria, la gestión y mantenimiento del túnel, como las obras por hacer», señala el autor, Piermario Curti.

Además, apunta que al ser un trabajo transfronterizo, «puede beneficiarse de las contribuciones de la comunidad europea». Destaca las obras de rehacer que empezaron a realizar en la estación de Canfranc y al adoptar las traviesas de doble vía (estándar español e internacional) es «un indicio inequívoco de la voluntad de no seguir siendo un hecho aislado».

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El autor italiano explica que Francia y España no sólo se fortalecen las conexiones ferroviarias entre los dos países con la construcción de la nueva línea rápida 150 kilómetros entre Montpellier y Perpiñán, parte de la cual se pretende no sólo para el tráfico de pasajeros, sino también para la carga, tanto es así que la uno bis en los Pirineos.

Sobre la repaertura del Somport señala que "las ambiciones son sin duda más contenidas dadas las características del ferrocarril con un recorrido que no es precisamente de gran capacidad". Aun así, destaca que "el objetivo es reabrir el túnel ferroviario de Somport, cerrado desde hace cincuenta años" porque el fin es "restablecer un enlace transfronterizo existente entre Francia y España, reuniendo lo que han quedado dos tramos nacionales, incluso locales, desde el cierre" (en 1970). 

Agrega que esta no es la primera vez que se intentó la repaertura entre los dos países, porque recuerda que "en 2002 ya se había lanzado un llamado a licitación, pero la cosa ya no se siguió" por el Gobierno de Francia.

"La ruta entre Zaragoza y Pau nació con grandes ambiciones, justificadas también por la decisión de construir un túnel en la frontera entre los dos países, que fue todo menos adquirido en su momento", señala. Aun así, Curti recuerda que no fue hasta 2009 "con la construcción de la nueva línea rápida entre la Perpignan francesa y la Figueres española para volver a romper los Pirineos, porque la línea histórica, la única existente hasta entonces, discurre por la costa mediterránea".

La ambición del ferrocarril Zaragoza-Pau "quedó claramente subrayada por la construcción en 1928 de la imponente estación internacional de Canfranc (que recuerda vagamente al edificio monumental de Turín Porta Nuova), hoy relegado después de 1970 a un papel marginal". Lo califica como se le puede calificar como "el puerto local español en los Pirineos".