Ligar con mascarilla y distancia social: el verano más complicado para los solteros

Que el período comprendido entre junio y septiembre es el más apropiado para el roce y el cariño es una idea que cada año desarrollan con tacto y dulzura las llamadas canciones del verano. Por eso el presente va a ser tan especial. Porque los solteros, los más interesados en la participación de verbenas y fiestas de todo pelaje, se van a tener que guardar las ganas de marcha para tiempos mejores, en los que la distancia social y las molestas mascarillas no sean más que recuerdos de un tedioso pasado. Y esto va a reducir en buena medida sus posibilidades de entablar nuevas amistades.

“Va a ser un verano difícil para muchos de ellos, la verdad, ya que como es obvio las indicaciones que las autoridades sanitarias nos indican reducen la espontaneidad y el contacto físico, dos claves básicas a la hora de iniciar relaciones sentimentales, sean del tipo que sean”, reconoce Estefanía Sáez, sexóloga del instituto Amaltea, en Zaragoza.

Probablemente, las limitaciones en ciertos sectores como el del ocio nocturno van a desplazar el ‘campo de batalla’ de las pistas de baile a otros entornos, en este caso diurnos y, hasta ahora, inexplorados. La experta considera que “es el momento de que mucha gente se dé cuenta de que no solo de noche ni bajo la influencia del alcohol se puede conocer a otras personas”, y sugiere “recurrir a ámbitos como las piscinas o las playas”.

Saéz invita a “perder poco a poco esa vergüeza que muchas personas tienen a la hora de romper el hielo bajo la luz del sol” y anima a “ser más natural en esos ámbitos poco explorados, pues es ante estas dificultades cuando nos debemos crecer”.

Claro, que la barrera de la mascarilla puede parecer casi infranqueable. O no: “Estamos acostumbrados a hablar y a centrar nuestra comunicación solo con la boca, pero hay otras partes de nuestra cara quizá olvidadas, como los ojos, que debemos recuperar. Con los ojos también se transmite y se puede sugerir y seducir. Además, y aunque en principio sean un impedimento, no olvidemos que las mascarillas, además de la evidente función protectora, pueden ser un elemento accesorio, hablar de nosotros, de nuestros gustos, de nuestras inclinaciones. Podemos aprovecharlas para romper el hielo si que compartimos gustos con la otra persona”.

De la app al encuentro seguro

Uno de los refugios de los solteros durante de la cuarentena, también una vez han regresado las restricciones a las terrazas y locales, han sido las apps de citas. “No se puede generalizar, pero en estos casos vemos que la gente está usando el chat para jugar algo más, cuando antes era un mero canal para quedar físicamente. No todos dan el salto a quedar en persona”, cuenta Sáez.

Romper el hielo en persona es más complicado. Hay que mantener las distancias, saludarse con el codo, llevar mascarillas… “Lo primero de todo, debemos pedir mucha precaución. No sabemos todo del bicho, pero sí que es silencioso. Hay un gran porcentaje de jóvenes que son asintomáticos, por eso deberían ir con precaución, cuidado y calma, aunque el cuerpo pida otra cosa. Nuestra cultura tiene asumido el contacto físico, los besos… ahora tenemos que ir más despacio, poco a poco, y ver posibilidades más allá. No pensemos en lo que el covid-19 nos quita, sino en lo que nos obliga a crecer, a tener que conocernos más antes de dar otros pasos. Y recordemos que la piel es el órgano sexual más grande de nuestro cuerpo, más que los genitales o la boca”, concluye la experta.