Aragón
Suscríbete

carta de recuerdo

"Combatiste en primera línea como los valientes, como hacías siempre"

Seis excompañeras del centro de salud del Arrabal firman la carta a José Luis San Martín, único médico fallecido en Aragón, que en ese momento trabajaba en San Pablo.

Carta a José Luis San Martín de sus excompañeras del centro de salud de Arrabal.
Carta a José Luis San Martín de sus excompañeras del centro de salud de Arrabal.
Heraldo

Estimado José Luis: 

Te has ido sin ruido, sigilosamente, nunca te gustó ser el centro de atención, pero esta vez de forma lamentable lo has sido, sin tú quererlo. Combatiste en primera línea como los valientes, como hacías siempre, sin escatimar esfuerzos, ni tiempo, con cualquiera que precisara de tu buen hacer, procurando remedio, consuelo, ánimo y esa alegría moderada y a la vez desbordante que te caracterizaba; pero esta vez el enemigo era terriblemente cruel, poderoso, desconocido… y caíste en la batalla como lo hacen los héroes, peleando hasta el final, cuando tus compañeros sanitarios comenzábamos a creer que la victoria caería de tu lado.

Nos has dejado aquí, con la tristeza y la pena en nuestra cara y en nuestros ojos llorosos, echándote muchísimo de menos, porque sabes muy bien que nos falta tu chispa. Te recordamos sentado en admisión a primera hora del turno porque no tienes dónde acomodarte. Con la sonrisa en la boca y una conversación distendida con todo el que por allí pasa, así nos gusta recordarte, así como tú eras. Fuiste un excelente compañero, el mejor que pudimos tener. Más aún: fuiste un amigo, dejaste el listón muy alto, José Luis.

Has sido un tipo excepcional y ocurrente como los grandes genios. Y me voy a referir con un ejemplo de los muchos que podría contar: solo a ti, querido José Luis, se le puede ocurrir cuando tenías guardia y entrabas a las 11.00, en lugar de a las 13.00 de la tarde, en el Centro de Salud que "tenías almuerzo". Y es que tu trabajo te hacía feliz y repartías la felicidad a los demás. Nuestra comunidad sanitaria tiene un enorme pesar por toda tu familia y por tus seres queridos, que no pueden disfrutar de ti a través de sus sentidos, aunque continúes viviendo en nuestros corazones.

No podemos pensar que todo acaba aquí, más bien creemos que te has ido para cuidarnos y sonreírnos desde esa dimensión superior en la que ahora estás, porque tú estás ahí en el cielo de los hombres buenos, que es lo que has sido. Hoy más que nunca tu sonrisa nos acompaña en nuestro quehacer diario. A seguir combatiendo, como tú nos enseñaste a pesar de estar cansados. 

Por ti, José Luis, por tu sacrificio, no queremos quejarnos y seguiremos trabajando como tú lo habrías hecho. Cada uno de nosotros te honrará como te mereces, con un aplauso, una oración, un brindis, un abrazo o lo que estime oportuno. Te seguiremos sintiendo cerca porque siempre estarás en el centro de salud Arrabal de Zaragoza.

Cuídanos, te seguimos necesitando.

Vea el especial de HERALDO "Homenaje a las víctimas aragonesas del coronavirus".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión