Turismo
Siete planes para disfrutar de Aragón en Semana Santa más allá de las procesiones
Para quienes ya han vivido la emoción de romper la hora y para aquellos que prefieren alternativas en estas fechas, hay Aragón para todos los gustos.
La Semana Santa en Aragón tiene a unos claros protagonistas: los tambores y los bombos, que alcanzan su máximo esplendor en las procesiones que hay programadas a lo largo y ancho de la Comunidad. También cobran relevancia los dulces tradicionales propios de esta época, por lo que disfrutarlos sin remordimiento se hace casi hasta obligatorio. Aquellos que ya se han animado a preparar sus propias torrijas en casa y quienes ya han vivido la emoción de romper la hora, además de recorrer los municipios que forman parte de la Ruta del Tambor y del Bombo, no deben darse por vencidos, puesto que todavía quedan muchos planes por vivir ya que Aragón se puede disfrutar con alternativas para todos los gustos.
¿Qué se puede hacer en Aragón esta Semana Santa?
Apurar la época de nieve
En los próximos días, muchas estaciones de esquí aragonesas despedirán su temporada. Por ello, es el momento de apurar las últimas jornadas sobre la nieve, bien sea practicando el deporte rey del invierno o disfrutando de una jornada en familia entre guerras de bolas de nieve, construcción de muñecos... Lo único que no hay que olvidar es el cuidado de la piel del rostro, muy expuesta en estas actividades.
Visitar los pueblos bonitos
La Comunidad cuenta con 13 localidades incluidas en la lista nacional de Pueblos Bonitos. Hace poco, el propio medio National Geographic se hacía eco de estas joyas en la provincia turolense. Así, si se cuenta con tiempo, es en este territorio donde más municipios poseen esta denominación, un total de siete. Si se prefiere la provincia oscense, allí se pueden encontrar cuatro y, en Zaragoza, dos.
Disfrutar de Ordesa
El mismo medio que puso el foco en las localidades turolenses, también echó la mirada arriba y eligió Ordesa como un destino imprescindible para visitar en primavera. Es en esta época cuando la Cola de Caballo y el resto de cascadas aumentan de volumen. Además, la tonalidad verde envuelve el camino hasta el circo de Soaso. Se trata de un destino adecuado para visitar en familia.
Ver Zaragoza desde lo alto
Los que ya han visto y hecho todo en la capital aragonesa (incluso han repetido las cosas que hay que hacer, al menos, una vez en la vida), pueden optar por una ruta de 'altura'. Zaragoza cuenta con increíbles miradores desde los que observar la majestuosidad de su patrimonio artístico y arquitectónico. Azoteas y terrazas se convierten en testigos de una experiencia única, siempre y cuando el cierzo lo permita.
Divertirse como niños...
Muchas familias organizan sus viajes y planes en torno a los más pequeños. Para ellos, Aragón es un auténtico paraíso de la diversión. En Zaragoza, además de las salas de teatro destinadas a este público, se puede disfrutar del acuario, del parque de atracciones y de actividades pensadas exclusivamente para ellos. En Huesca, el planetario y Lacuniacha, son dos visitas obligadas.
Comer en plena naturaleza
Aquellos que prefieren las escapadas de un día, hacer un picnic en plena naturaleza es una alternativa original. Cerca de Zaragoza se pueden encontrar varios merenderos con encanto. Se trata de una opción buena, bonita y barata que permite multitud de elaboraciones, mientras se disfruta de la riqueza del entorno de la Comunidad.
Estrellas Michelín
Los amantes de la buena gastronomía también pueden saciar sus ansias de degustar los mejores manjares esta Semana Santa. Por un precio razonable se puede disfrutar de los variados y originales menús de los que disponen los cinco restaurantes aragoneses que han obtenido esta distinción. Tanto en la provincia de Huesca como en la de Zaragoza se pueden encontrar dos, mientras que en Teruel, uno.
