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La La Land: beneficios del baile

Bailar es fuente de salud, tanto mental como física. No sólo mejora la resistencia física, sino también la memoria, nos pone de buen humor y nos acerca a los demás.

Imagen de la película 'La ciudad de las estrellas (La La Land)'.

La película ‘La La Land’ ha encandilado a todo el público gracias a la magia del baile. Pero bailar es además fuente de salud física y mental.

He aquí un listado de algunos de los beneficios que nos proporciona el baile:

1.- Beneficia al cuerpo: Bailar tiene las mismas ventajas que practicar un deporte a nivel medio-alto: mejora la resistencia física y la movilidad articular, además de ayudar a quemar calorías y a corregir la postura corporal.

2.- Activa la mente. Además de al cuerpo, el baile hace bien también a la mente: recordar los pasos y las coreografías es un buen ejercicio para la memoria.

3.- Nos pone de buen humor. El movimiento y la música estimulan la producción de endorfinas, las sustancias responsables del humor, el buen ánimo y la alegría, y alejan la melancolía y los pensamientos negativos. Ayuda a enfrentar las dificultades con mayor optimismo.

4.- Nos ayuda a relacionarnos y a socializar. El contacto físico ayuda a vender la timidez y está recomendado para encontrar la armonía.

5.- Nos pone en contacto con nuestro yo. El baile nos hace expresar nuestras emociones de manera directa, mostrar nuestro estado de ánimo de forma natural. De esta manera nos ponemos frente a nuestras sensaciones más personales y podemos conectar con nuestro yo más íntimo, con nuestros deseos y también con nuestra ansiedad o nuestra rabia y eliminar esa angustia dejándola salir a través del movimiento.

6.- Libera del estrés. El baile consigue que descarguemos las tensiones físicas y mentales que nos asaltan a lo largo del día. La música y el movimiento colaboran a distender los nervios y tranquilizarnos. Además aumenta nuestra autoestima y la conciencia de nosotros mismos.

7.- Nos hace más inteligentes. El psicólogo Peter Lovatt, ex–bailarin profesional, ha comprobado que bailar nos ayuda con la toma de decisiones. Sus estudios concluyen que la improvisación al bailar, nos ayuda a enfrentarnos mejor frente a problemas en los que hay múltiples soluciones

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