El Ejecutivo no rebate el desvío de 73,3 millones el Plan Impulso para abonar nóminas
Achaca la baja ejecución del proyecto estrella de Rudi al "limitado plazo" y a "incidencias" que surgieron durante el desarrollo
Achaca que solo se gastaran 1,4 millones de los 4 presupuestados para el Ingreso Aragonés de Inserción a "la necesidad de conciliar prestaciones económicas cuyo reconocimiento implicaba una asunción de la obligación para periodos de 12 meses de ejercicios futuros con la dotación que se incorpora al plan por un periodo de cuatro meses". El Ejecutivo, asimismo, admite que "no se pudieron alcanzar los objetivos de ejecución previstos" en determinados supuestos.
Insiste el Gobierno autonómico en que el Plan Impulso cumple la ley y el Estatuto, pese a que prohíben destinar fondos obtenidos de endeudamiento a gasto corriente y establecen que se destinen a inversión. Su defensa sigue ahondando en que en el cómputo global del presupuesto, la inversión supera al endeudamiento.
La DGA también critica que la Cámara de Cuentas censure que no se usaran los fondos que se obtuvieron de la flexibilización del déficit a "absorber las desviaciones presupuestarias" en 2013 (ese año se incumplió el objetivo de déficit). Advierte de que es una decisión de "naturaleza política".
Además, en su informe de alegaciones intenta rebatir que al final el Plan Impulso se utilizara para partidas que estaban infradotadas del presupuesto; o que sea complicado su seguimiento, puesto que se articuló a través de partidas genéricas; o que se cambiara el destino inicial de los fondos, o que no exista un análisis de resultados.