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Solo un 10% de los parados tiene titulaciones superiores universitarias
Administraciones y empresas siguen poniendo el foco en la adecuación de un empleo de calidad a la formación de los titulados universitarios.
El pasado 30 de junio se registraba en Aragón una tasa de paro que alcanza las 76.460 personas, es decir, un 28,49%, más que en las mismas fechas de 2019, lo que evidencia la caída del empleo de los últimos meses derivada de la pandemia.
De esta población que no está en activo, un total de 7.731 han recibido una enseñanza superior universitaria, es decir, solo un 10% del total, según los datos del Instituto Aragonés de Estadística que acaban de publicarse tras el primer semestre del año.
La adecuación del empleo a la formación de los universitarios, apostando por un desarrollo laboral de calidad, es el objetivo de los agentes públicos y privados, administraciones y empresas. De esa relación depende el incremento de la productividad de la región y la solidez de su crecimiento económico.
Actualmente, y con el Espacio Europeo de Educación Superior, tras el grado universitario, se ofrece el máster como programa de especialización y, finalmente, y con una orientación claramente investigadora, los estudios de doctorado. Según el último Barómetro de Empleabilidad y Empleo Universitarios (edición máster), el 88,28% de quienes respondieron la encuesta coincidió en que el nivel de estudios más adecuado para desempeñar su trabajo era el universitario.
El máster, ya sea oficial o impartido a través de un centro de estudios privado, es uno de los factores diferenciadores a la hora de encontrar empleo, según el último Barómetro de Empleabilidad y Empleo Universitarios (edición máster). Los datos muestran que un 44,8% de los estudiantes obtiene empleo antes de finalizar el máster. Del restante 55,1%, algo más de la mitad (51,71%) obtiene el empleo antes de los seis primeros meses, mientras que el 26,75% lo hace antes de los tres primeros meses y el 72,5%, antes del primer año.
Por otra parte, el barómetro analiza el ajuste entre el nivel formativo y el empleo desde diferentes perspectivas. De hecho, el 65,3% de los estudiantes encuestados considera que su último empleo estaba totalmente relacionado (41%) o muy relacionado (24%) con los estudios de máster realizados.
Entre los métodos utilizados en la búsqueda de empleo destacan los portales de empleo, la auto presentación y el contacto directo o ‘networking’ (más del 50% de los casos). El 38% ha utilizado los servicios públicos de empleo, mientras que el 26,93% ha recurrido a los servicios de empleo de su universidad en dicho proceso.
Al valorar el empleo obtenido, los estudiantes coinciden en señalar las actividades y funciones desempeñadas como lo más positivo de la experiencia, en contraposición con el salario o la estabilidad, que son los aspectos peor valorados.
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