Si compras por Internet, así puedes proteger tu tarjeta de crédito

De todas las múltiples actividades y aplicaciones que ofrece internet, las compras a través de comercios electrónicos son cada vez más habituales. De hecho, los compradores 'online' en Aragón crecieron el pasado año hasta superar el medio millón, con un gasto medio de unos 1.500 euros. Ventajas como la comodidad de compra, la rapidez y la amplia variedad de catálogo hacen que en muchas ocasiones no se tengan en cuenta los riesgos de este tipo de compras: la seguridad y privacidad de los datos bancarios. 

Aunque existen aplicaciones para evitar registrarse en todas las páginas en las que se hace una compra, la tarjeta de crédito sigue siendo el método más utilizado para pagar por Internet.  Antes de hacerlo, conviene conocer una serie de pautas básicas para evitar que dichos datos sean robados.

Utiliza una única tarjeta. Para evitar riesgos, lo mejor es crear una tarjeta -a ser posible de crédito antes que de débito, ya que son más seguras- que se destine solo a estas operaciones. Muchas entidades bancarias ya ofrecen esta opción sin necesidad de abrir otra cuenta ni comisión. Comprueba que sea un sitio seguro. Antes de iniciar la compra, hay que comprobar en la barra de navegación que la página web tiene un símbolo de un candado y comienza por ‘https’. Este término garantiza que el sitio cuenta con certificados de seguridad que protegen tus datos. Configura tu navegador. Tras hacer la compra, conviene borrar las ‘cookies’ y el historial del navegador, además de desactivar la función de autocompletar, para que las contraseñas y los números de tarjeta no queden guardados en el ordenador. Aunque seas el único usuario del dispositivo desde el que se hace la compra, si se sufre un ataque de un virus informático, se corre el riesgo de que alguien obtenga dichos datos. Evita el wifi público. En este tipo de redes, el administrador es capaz de interceptar lo que estás haciendo desde tu dispositivo, por lo que puede acceder a los datos que introduces. Además, en la mayoría de las ocasiones, al aceptar las condiciones de uso, se acepta también de forma automática la opción de compartir, por lo que otros usuarios pueden acceder a ciertas carpetas compartidas. Si no queda otro remedio, conviene borrar de nuevo el historial de navegación y apagar el dispositivo utilizado.