La reforma integral de la avenida de Sagunto, la principal calle de Teruel por el tráfico que soporta, empezará el próximo mes de julio, tras las fiestas de La Vaquilla. La actuación, denominada de "humanización", está financiada por el Ministerio de Transportes y acaba de ser adjudicada por 6.399.864 euros a Pavasal Empresa Constructora.

El proyecto, por cuya ejecución competían 13 ofertas, contempla reducir la presencia de vehículos en la calzada, que pasará de los actuales tres carriles a solo dos, uno para cada sentido de circulación. La obra habilitará un carril para movilidad personal con patinetes y bicicletas y potenciará el uso peatonal. El tramo comprendido entre la confluencia con la Cuesta del Carrajete y la circunvalación de la N-234 pasará de cuatro a tres carriles.

Los dos carriles destinados al tráfico rodado se estrecharán para que los coches reduzcan su velocidad. El proyecto, que salió a licitación con un plazo de ejecución de 12 meses y con un presupuesto de 7.441.703 euros, obligará, durante su ejecución, a desviar el tráfico de vehículos por el interior del barrio del Ensanche.

El Ministerio plantea, mientras duran las obras, la solución de destinar un carril de la avenida al tráfico en sentido Fuenfresca-Centro Histórico mientras que la dirección contraria se desviaría por el interior del Ensanche, pasando por las calles Miguel Servet, José Torán, Ruiz Jarabo, Barcelona, Avenida de Aragón, Beato Joaquín Royo y Carretera de Castralvo.

El concejal delegado de Infraestructuras, Juan Carlos Cruzado, que se ha reunido esta semana con representantes del Ministerio de Transportes para planificar la ejecución de la reforma, indica que los desvíos del tráfico se decidirán a medida que se ejecute la obra en función de las necesidades de cada momento y de acuerdo con la Policía Local.

También se renovará el sistema de iluminación de la avenida para instalar, donde no existen, lámparas de bajo consumo y se mejorará el alumbrado en tres enlaces de la ciudad. Uno de ellos es el que va hacia el centro de Teruel desde la autovía Mudéjar o A-23. Otro, el que se encuentra en la N-234 en dirección a Villaspesa. Por último, contará con nuevas luminarias el enlace que se confluyen el acceso del polígono industrial La Paz, la carretera de San Blas, el Parador Nacional, la Variante Norte de Teruel de la N-234 y el ramal de acceso a la A-23.

Aceras antideslizantes

La reforma renovará las aceras y las actuales baldosas, muy resbaladizas en caso de lluvia o nevada, serán sustituidas por adoquines de hormigón antideslizantes. Se reforzarán el arbolado y el mobiliario urbano.

La adecuación incluye la instalación de un pavimento que absorverá el ruido provocado por el paso de vehículos. Las zonas de carga y descarga así como las paradas de autobús se redistribuirán y, aunque se mantendrán zonas de estacionamiento de vehículos, las plazas pasarán de estar en batería a ser lineales.

La financiación de la reforma correrá a cargo del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Una vez completada la remodelación, la titularidad pasará al Ayuntamiento de Teruel para su conservación.