Proyecto Hombre atiende a 1.228 personas adictas en Aragón: estas son las drogas más consumidas

La comunidad terapéutica de Miralbueno tiene una lista de espera de más de 50 pacientes. La entidad reclama un centro específico solo para mujeres.

Jesús Sánchez, Carlos Gómez y Pilar Aznar, en la presentación del balance de 2023 del Centro de Solidaridad de Zaragoza-Proyecto Hombre
Jesús Sánchez, Carlos Gómez y Pilar Aznar, en la presentación del balance de 2023 del Centro de Solidaridad de Zaragoza-Proyecto Hombre
Oliver Duch

El Centro de Solidaridad de Zaragoza-Proyecto Hombre (CSZ-PH) atendió durante 2023 a 1.228 personas por adicciones, de ellas 1.002 hombres (representan el 80%) y 226 mujeres (20%). Este número supone un ligero descenso respecto a 2022, cuando fueron 1.285, de un 4,44% que no significa que estas situaciones vayan a menos. El director del Centro de Solidaridad, Jesús Sánchez, llama la atención sobre los 381 pacientes que por primera vez accedieron a un tratamiento en esta fundación el año pasado. Además, hay una lista de espera de más de 50 personas para ingresar en la comunidad terapéutica de Miralbueno, la única que existe en Aragón de carácter público con 45 plazas convenidas con la DGA.

Las drogas más consumidas por los usuarios de la entidad siguen siendo, como en los últimos años, la cocaína (298 usuarios, el 24,26%), el alcohol (292, el 23,77%), la heroína (237, el 19,3%), el cannabis (207, el 16,8%) y, en menor medida, las derivadas de las anfetaminas (116, el 9,4%). Si a los pacientes se suma la ayuda proporcionada a los familiares y otros allegados de su entorno, la asociación apoyó a un total de 1.676 ciudadanos en sus diferentes programas.

Estos son algunos de los datos que arroja el balance de CSZ-PH que ha presentado este jueves Sánchez junto con Carlos Gómez, presidente del Centro de Solidaridad de Zaragoza y Pilar Aznar, presidenta del comité ejecutivo de la fundación. “El problema sigue estando ahí, muy presente, no tiene que ver con el dramatismo que se vivió en los años 80 del siglo pasado, pero vamos a tener que seguir conviviendo con las adicciones”, señala Sánchez.

En las instalaciones de Miralbueno, el único recurso de estas características que forma parte de la red de Salud Mental de la Comunidad, recibieron tratamiento el año pasado 131 pacientes, 104 hombres y 27 mujeres, que principalmente abusaban del alcohol, un 36,64%, seguido de la cocaína, el 32,82%. La edad media de los residentes es de 41,83 años, aunque tienen un amplio abanico de edades comprendidas entre los 19 y los 63 años.

Cuando se sale de este centro, en el que la estancia media es de entre siete y ocho meses, hay usuarios que no disponen de medios ni de una estructura familiar para continuar su proceso de inserción. Para darles una solución se puso en marcha de septiembre de 2022 un piso supervisado de transición con cinco plazas en el que a lo largo del año pasado residieron 8 hombres y dos mujeres, que en él encontraron un espacio en el que aprender a vivir fuera de las drogas antes de incorporarse a la sociedad. Un espacio del que Aznar destaca su "buen funcionamiento y resultados".

Diferencias de género

Entre las reclamaciones de Proyecto Hombre destaca la puesta en marcha de un espacio exclusivamente femenino con entre 12 y 15 plazas. El proyecto se ha vuelto a presentar tras el cambio de gobierno a los departamentos de Sanidad y Presidencia, ya que de este último depende el Instituto Aragonés de la Mujer (IAM). 

Aunque no han dado a conocer la inversión que sería necesaria, la presidenta del comité ejecutivo de la fundación asegura que están "dispuestos a asumir nuevos retos" y cuentan con el aval de los "buenos resultados" que este tipo de residencias están teniendo en otras comunidades donde ya existen, como Castilla-La Mancha y Cataluña.

En el caso de las mujeres, el alcoholismo es con diferencia el principal problema que presentan en el 38,5% de los casos. Además, el tiempo que transcurre desde que transcurre desde que reconocen el problema hasta que solicitan tratamiento suele prolongarse más de una década, por lo que sufren un importante deterioro a todos los niveles. La apertura de este centro reduciría también la lista de espera para Miralbueno.

Acerca del alcohol, el director de Proyecto Hombre se muestra partidario de que se apruebe a nivel estatal una ley contra su consumo entre los menores, una norma que lleva arrastrándose desde el 2001. Ya la anunció Mariano Rajoy como presidente de España y ningún ministro de Sanidad desde entonces ha conseguido que sea una realidad. Además ve con buenos ojos que el vino y las "bebidas espirituosas" luzcan etiquetas con sus valores nutricionales al igual que los productos alimentarios.

En cuanto al fentanilo, que se ha convertido en una droga letal en Estados Unidos en los últimos años con unos números que empiezan a aterrar, Sánchez confirma que en Proyecto Hombre no se han encontrado con ningún caso y que está "muy controlado" por el Ministerio de Sanidad, aunque no se sabe "lo que puede deparar el futuro". Sí se ha detectado en España el fentanilo mezclado con otras sustancias.

Las Uasas, pendientes del contrato con la DGA

Desde 2013 el Centro de Solidad de Zaragoza ofrece dos centros reconocidos como Unidades de atención y seguimiento de las adicciones (Uasas), dentro del Plan autonómico de drogodependencias del Gobierno de Aragón. El año pasado atendieron a 1.442 personas, entre usuarios, familias o padres preocupados. De ellas, 574 ingresaron en los programas ambulatorios.

La fundación está pendiente de suscribir un nuevo contrato o concierto con el Departamento de Sanidad de la DGA, ya que el anterior finalizó en septiembre de 2023 y desde entonces vienen  funcionando con una prórroga económica. La presidente del comité ejecutivo reconoce que "no es una situación cómoda" y que están "impacientes" por solucionar esta cuestión, ya que con este sistema, en el que las facturas tienen que ser convalidadas por el Consejo de Gobierno, los pagos se retrasan demasiado.

Los jóvenes tienen un espacio esencial en el programa Tarabidán y por él pasaron 103 casos, 82 chicos y 21 chicas entre los 14 y los 20 años, de una edad media de 17,90 años. También ofrece la intervención con menores infractores sometidos a tratamiento, que fueron 28. El cannabis es la sustancia mayoritaria por la que se solicita tratamiento.

La atención se extiende también a la población reclusa de los módulos terapéuticos de Zuera y Daroca, con el seguimiento a 103 personas, información a otras 46 y 14 derivaciones por parte de Instituciones Penitenciarias al centro de Miralbueno. La prevención también es vital y el año pasado se llevó a cabo formación en 14 instituciones con la asistencia de 376 personas. En los servicios del Centro de Solidaridad de Zaragoza hacen prácticas también sanitarios residentes de medicina, enfermería y psicología.

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